En los números parece algo bueno para la moral, las buenas costumbres, los ideales argentinos (si es que acaso eso existe a estas alturas). Pero ¿qué es lo que realmente significa? Pensémoslo bien... Películas que explotan el tema papal, ahora el sumo pontífice se ha convertido en una especie de héroe al que acuden los directores, escritores, fotógrafos para generar empatía, y, obviamente, vender, vender mucho. Ni que hablar de los medios que tratan de llenar sus huecos (huecos en el peor sentido) hablando de algún gesto entretenido del líder religioso.
Cualquier cosa que haga el Papa vende. Y como es "buen tipo", según muchos que no son católicos, pero no pueden dejar de simpatizar con una persona tan humilde, el se deja, se deja abusar. Abusan los políticos, abusan los medios, abusan los equipos de fútbol, y la gente en general. ¿Será que ahora la gente es más religiosa? ¿Habrá cambiado algo en sus vidas? ¿O simplemente es otra de esas manifestaciones del orgullo nacional, como cuando la Selección sale campeona del mundo, (cada vez menos por cierto), o cuando un mal pagado miembro del CONICET hace algún descubrimiento con el poco equipamiento que le da el Gobierno?
No parecen haber crecido los valores argentinos (lo digo desde mi lugar de argentino) desde que el Papa es argentino.
Más bien si algo ha crecido es nuestra ya bien conocida arrogancia, nuestra soberbia. Por que al parecer ahora no sólo Dios es argentino, sino que el Papa también. Y ¿Quién nos para ahora? Nos creemos con derechos divinos desde que se pinta, ya desde el siglo XIX representaciones de María con los colores patrios y erigida sobre las demás naciones, sobre el resto del mundo.
No nos cuesta mucho encontrar razones para sentirnos superiores.
¿Son más religiosos los Argentinos ahora? Tal vez hay más católicos. Pero hay pocos cristianos, al parecer, si entendemos por cristianos a aquellos que imitan a Jesús de Nazaret. Pocos que sean humildes, pocos que sean modestos, pocos sabios sin duda, pocos, muy pocos mansos.