El presidente argentino, Mauricio Macri, reaccionó ante la multitudinaria concentración de gremiales sindicales, que protestaron este viernes contra la inflación, el aumento a las tarifas de servicios y la decisión de vetar la ley antidespidos. Durante un evento en la norteña provincia de Tucuman, el mandatario se limitó a pedir paciencia y se comprometió a dar soluciones: "Todos los días trabajamos para bajar la inflación y recuperar el empleo."
En misma línea reaccionó su jefe de gabinete, Marcos Peña, quien avaló las exigencias de los manifestantes; pero discrepó con la situación laboral que atraviesa el país: "Las políticas que impulsamos, estoy seguro, crearán empleo como pocas veces en la historia del país."
Sin embargo el discurso del Gobierno permanecerá en tela de juicio para el sector sindical, que amenazó con aumentar sus medidas de hecho hasta un paro a nivel nacional, si el presidente, Mauricio Macri, veta la ley antidespidos y no revierte los efectos de la inflación a la brevedad.