Hay ocasiones en las que no queda más remedio que rendirse a la evidencia y rectificar en un error que, aunque ahora mismo no tenga mucho arreglo, al menos deja apuntado en la historia que se cometió dicho error y que todos puedan saber que incluso aquellos que en su momento tuvieron que aplaudirlo también puedan saber que no estuvo bien.
En este caso el error fue entregarle a Lionel Messi el Balón de Oro como mejor jugador del Mundial de Brasil 2014. Nadie en el Estadio Jornalista Mário Filho, más conocido como El Maracaná, podía creerse la noche del 13 de julio de 2014 lo que todos estaban viendo en el estadio y por televisión.
Lionel Messi fue el ganador del trofeo a pesar de no haberlo demostrado, ni mucho menos merecerlo.
Incluso en la cara del propio astro argentino se podía ver que estaba incómodo con la decisión de la organización. Ni siquiera él consideraba que mereciera el premio. Su rostro mostraba su deseo de pasar el mal trago y abandonar el campo lo antes posible, pues ese premio hacía un poco menos importantes a todos los que había recibido, pues dejaba claro que no era necesario para el astro argentino hacer un campeonato objetivamente bueno para recibir trofeos. Esa noche quedó un poquito más claro que el nombre que llevaba en la camiseta era una gran ayuda para recibir trofeos, fueran merecidos o no.
Esa noche el legado de Messi recibió un flaco favor.
Hace unos días, en la presentación del logotipo para el siguiente mundial de fútbol, Joseph Blatter, presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), habló claro sobre el tema. "Considero que la decisión fue incorrecta. Me sorprendió cuando recibí la decisión adoptada por el comité.
Me dijeron que analizaron sólo a diez jugadores que tomaron parte en la final", dijo Blatter a la prensa local. Además, manifestó que en su opinión fue Manuel Neuer quien debió recibir el galardón.
Duras palabras, pero muy necesarias. El nombre de Messi merece el suficiente respeto como para poder hablar con claridad de los premios que ha ganado y los que no. Este es un premio que le han dado pero no ha ganado y como tal hay que hablar claro de este tema, pues solo quitando impurezas brillan los Balones de Oro.