Los Toronto Raptors son ahora mismo una de las plantillas con mayor proyección de la Conferencia Este y la única, junto a los Atlanta Hawks, que ahora mismo ha sido capaz de enfrentarse de manera solvente y continuada a los grandes monstruos de la Conferencia Oeste, los Golden State Warriors, los Portland Trail Blazers y los Houston Rockets, los tres equipos con mejor balance de victorias y derrotas de toda la liga de baloncesto profesional de Estados Unidos. Y los han logrado con base en un conjunto de jugadores que en la mayor parte de los casos aportan mucho más por la unión que tienen con sus compañeros que en el aspecto individual, donde la franquicia ha sacrificado mucho para poder entregarle al entrenador un grupo de integrantes de la plantilla que puedan compenetrarse de la manera correcta.
Por el contrario, la plantilla de Los Ángeles Clippers gira alrededor de Blake Griffin, principal estrella del equipo y el referente de la mayor parte de las jugadas ofensivas y hombre de cierre en las defensivas. El partido ya desde el principio parecía decantado hacia los canadienses y así se vio sobre le campo.
Ya desde el inicio del encuentro los Toronto Raptors fueron muy claros respecto al tipo de planteamiento que harían en lo que ha defensa se refiere. Pusieron mucha y especial atención en que Blake Griffin no recibiera ningún balón en una posición que le fuera mínimamente cómoda, forzando a Los Ángeles Clippers a entregarle el balón en un lugar en el que no pudiera inmediatamente aprovecharse de la disposición de los jugadores en el campo, con lo que le forzaban a realizar la jugada prácticamente en solitario o a arriesgar enormemente la pelota en un pase que en muchos casos les costaba un robo de balón y un contraataque, en el que los Toronto Raptors son muy buenos al poder realizarlo cualquiera de los jugadores sin problemas.
En el primer cuarto lograron los californianos llevarse el marcador, pero según fueron pasando los minutos del segundo ya empezaban a verse las primeras grietas en muchas de las intentonas que hicieron para anotar, con lo que poco a poco fueron perdiendo comba hasta acabar en el último cuarto con un 20 a 30 en contra que les daba la victoria a los Toronto Raptors por un 110 a 98 que suena a poco si se ve el partido.