El esperado momento se hizo desear pero finalmente llegó el instante en el que Argentina tiene un nuevo gran maestro. Quien podrá ser, el que viene de ganar un mundial, el que esta en boca de todos, el que no deja de sorprender día a día con sus desempeños.

Alan Pichot alcanzó la categoría más alta entre los ajedrecistas tras la igualdad que consiguió frente al cubano Carlos Hevia. Con un dato particular y significativo ya que se convirtió en el ajedrecista argentino más joven en conseguir el rotulo de gran maestro. Y se suma a una extensa lista de compatriotas que también llegaron a esa categoría.

Con el ya son 32 los argentinos que formaran parte del libro del ajedrez nacional.

La hazaña y el récord se consumó tras cuatro horas de juego y 35 jugadas con el cubano en una partida que finalizó en empate.

Con esta marca de Alan, superó a Federico Pérez Ponsa que a los 17 años, 9 meses y 10 días poseía el anterior récord. También hizo lo propio con Damián Lemos que a los 18 años, 6 meses ostentó la marca. La derrota con su profesor, Diego Flores, no le permitió llegar a la norma que tanto buscaba pero como en el deporte siempre hay revancha esta vez no la desaprovechó contra Carlos Hevia. No fue victoria y con el empate logró su anhelo de ser gran maestro con 16 años, 9 meses y 9 días.

Pichot sabe bastante lo que es ganar competencias de jerarquía. La primera norma la obtuvo en el magistral aloas en noviembre de 2004 y la segunda la consiguió en la sexta copa latina efectuada en marzo de este año. En esta copa continental de Montevideo venció a grandes maestros y tuvo un arranque demoledor con 5,5 puntos en 7 ruedas.

De ahora en adelante siguen los desafíos para el nuevo gran maestro en el que buscará clasificarse para las olimpiadas de Bakú 2016. En su vuelta al país jugará el torneo de FAOGBA en la universidad de Morón y el magistral de CENARD.

Otro objetivo para Alan es poder participar del mundial sub 20 pese su corta edad ya que el de menores de 18 no está entre sus prioridades.

Alan Pichot es la nueva estrella del ajedrez argentino y quiere ir por todo. Seguir aprendiendo, acumular experiencia y batir muchos récord más es su meta. Mezclarse con fuertes maestros va ser posible y ser el mejor ajedrecista de nuestro país de todos los tiempos tampoco es imposible.