Contundente. Ese es el adjetivo justo para definir la victoria de River Plate ante Cruzeiro por 3 a 0 en el partido de vuelta de cuartos de final de la Copa Libertadores. El conjunto de Nuñez queda a la espera del partido entre Racing y Guaraní de Paraguay que defina quién será su próximo rival en semifinales.
Las especulaciones fueron muchas dadas las circunstancias, pero River logró salir airoso del encuentro disputado en Brasil. El historial le jugaba en contra: desde 1976 a 1998, el equipo riverplatense sufrió ocho derrotas ante Cruzeiro y cosechó sólo dos victorias.
En el partido de ida que se disputó en el Monumental de Nuñez, el conjunto argentino prácticamente fue un fantasma que vagaba en el campo de juego, aunque el equipo carioca tampoco demostró gran Fútbol pero corrió con la suerte de convertir un gol de visitante, lo que complicaba las chances del millo para seguir en la copa. Sin embargo, los once de Marcelo Gallardo salieron a dar batalla en Belo Horizonte y prácticamente anularon a su rival.
A los 19 minutos del primer tiempo, Teo Gutiérrez buscó desbordar por la izquierda y, en lugar de hacer la individual como de costumbre, levantó la cabeza en busca de Carlos Sánchez, quien recibió cómodamente el pase y marcó el primer gol del encuentro para River con un derechazo cruzado al segundo palo del arquero.
A los 43, Leonardo Ponzio se encontró con una gran oportunidad y remató al arco, pero la pelota se fue apenas desviada. Sin embargo, a los dos minutos, Ariel Rojas ejecutó un córner desde la izquierda que encontró la cabeza de Jonatan Maidana, quien con un certero cabezazo al ángulo marcó el 2 a 0 a favor de la banda. Ya en el segundo tiempo, el Millonario selló la sentencia: a los 6 minutos, una genialidad individual de Teo puso el 3 a 0 definitivo con un remate al ángulo inferior derecho del arco, ahí donde "duermen las arañas".
Cruzeiro trató contrarrestar tibiamente el resultado con dos remates infructuosos que se estrellaron contra el palo y el travesaño respectivamente.
Luego del traspié en el partido de ida, River sabía que tenía que salir a ganar a toda costa sin importar que jugara de visitante y lo logró. Mostró un juego preciso ante un Cruzeiro débil, ese mismo que perdió 3 a 1 contra Huracán en la fase de grupos.
El conjunto de Belo Horizonte no supo generar los espacios, contrario al equipo riverplatense, que le vulneró la defensa en muchas ocasiones y dominó la pelota la mayor parte del encuentro.
River gustó, goleó y brilló para demostrar que se afianza cuando las papas queman.
El humor siempre está presente
Luego de la goleada, los clásicos afiches dedicados a su eterno rival, Boca Juniors, no se hicieron esperar. Las redes sociales fueron inundadas con las "cargadas" hacia los xeneizes, burlándose de la victoria del equipo de la ribera ante Huracán Las Heras, que se disputó horas antes del encuentro riverplatense, así como también los alusivos al delantero Daniel Osvaldo, con un "meme" clásico de Los Simpsons con la leyenda "¡¿Alguien quiere por favor pensar en el sobrino de Osvaldo?!".