En julio de 2010, la Secretaría de Deportes conducida por Claudio Morresi, puso en funcionamiento el ENARD (Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo). El fin de este dispositivo fue y sigue siendo abastecer a todas las disciplinas deportivas con recursos económicos, médicos, humanos y herramientas para que los atletas puedan desarrollar sus actividades de manera correcta, madura y seria, a fin de que progresen y puedan potenciarse.
Han pasado los juegos deportivos panamericanos de Guadalajara en 2011 y los juegos olímpicos de Londres en 2012.
Este año, en el mes de julio, en Toronto, Canadá, se pondrán en marcha los juegos de toda América nuevamente y Argentina, por primera vez, tras un esfuerzo político y un trabajo constante del nuevo secretario, el exmedallista de Atlanta 96', Sydney 00', Atenas 04' y Beijing 08', Carlos Espínola y un equipo apoyado por el Ministerio de Desarrollo Social a cargo de Alicia Kirchner, irá con 482 representantes clasificados, que participarán en 35 de las 36 disciplinas.
La inversión realizada de 382 millones de pesos en 15 meses, es recaudada a través de un impuesto a la telefonía celular equivalente a 1 peso por mes. Este apoyo al deporte jamás se ha visto desde el primer y el segundo gobierno de Juan D.
Perón, quien impulsó esta área como política de estado, organizando los primeros panamericanos de la historia en Buenos Aires, en 1951, con la victoria argentina en la lista final de medallas sobre el resto de los países, logro que jamás se volvió a repetir.
Según el gerente deportivo del ENARD, Carlos Siffreddi, Toronto nos dará un termómetro para cerrar el círculo.
Ellos esperan un sexto puesto argentino, como mínimo, peleando el lugar con Colombia.
Nuestro país, que ha sufrido un permanente saqueo desde la segunda mitad del siglo XX hasta el 2003 en todas las áreas -en donde el deporte no se salvó-, busca, como ocurre con el resto de los sectores que hacen a la patria, mejorar en este aspecto, para que Argentina vuelva a estar entre los primeros 15 países deportivos del mundo, con miras a los JJOO de Río 2016.
Esta política se complementa con el apoyo a los deportistas con capacidades especiales, quienes, en los panamericanos, juntarán a 197 participantes en 15 actividades, buscando un mejor posicionamiento.
Otro dato del recambio y del crecimiento, es que el 58% serán debutantes, mientras que el 16% de nuestro representantes ya han obtenido medallas.
Se ha contratado a 12 entrenadores de primer nivel internacional, para crecer en calidad y se ha equipado con 14.482 herramientas para los participantes. Se han becado a 871 atletas y a 341 entrenadores y managers.
Los deberes se han hecho de la mejor forma. Ahora será el turno de competir y desde este piso crecer también en esta actividad, que educa y contiene a miles de jóvenes que de otra manera, se perderían en los tentáculos perversos del sistema hegemónico.