Nuevamente de menor a mayor. Argentina fue creciendo a lo largo de los minutos, encontró mayores variantes y terminó ganando el partido ante Panamá. Un comienzo de poco vuelo, donde el albiceleste necesitó encontrarse en todo aspecto, pero terminó fulminando y desgastando a su rival de turno.
El arranque no fue nada bueno. Como sucedió ante Uruguay, Argentina necesitó de un buen tiempo para aclimatarse al juego. Un comienzo liviano en defensa, con muchas complicaciones adelante y un juego muy equilibrado. Richotti, que inició como titular, aportó de temprano los primeros cinco puntos del equipo.
Argentina mostró poco juego, Panamá defendió bien y con Hicks (5) igualó y Gaskins con un triple colocó 8-5 arriba a los caribeños.
El albiceleste siguió muy poco efectivo (5-16), aunque un par de buenas defensas, la presencia de Delia y un poco de dinámica en ataque, hizo que Argentina, con un 7-0 tome las riendas 12-8. Panamá se cerró en su defensa, Scola no tomó demasiadas decisiones, y encima el equipo no la metió de afuera (0-4t3) dejando que su rival reaccionó, recupere el comando, y recién el final Delia empate en 13 en un chato comienzo.
Argentina encontró gol y juego con los cambios. Las apariciones de Campazzo y Garino fueron vitales para correr en contragolpe, generar gol de media distancia y mayor claridad.
Panama mantuvo su libreto, defendió duro, ganó los rebotes y obligó al error a Argentina. Con el marcador 17-16 para los caribeños, el albiceleste corrió, tuvo variantes y efectividad gracias a un bombazo de Campazzo, un elegante doble y falta de Garino y parcial de 7-0 para la ventaja de 23-17.
Con la ventaja de 26-20, Argentina volvió a tener un bache en ataque.
Hernández cambió a un equipo mas dinámico y versatil, y a pesar de que Hicks se recuperó (2-2t2) e igualó en 26, allí llegó el click del juego. Campazzo y Garino fueron el duo perfecto atacando, sumado a la fortaleza de Gallizzi reboteando y bloqueando. Panamá se perdió (0-6 de campo), y Argentina lo aprovechó con un 8-0 cerrando con claridad 34 - 26 la primera parte.
Nuevamente el tercer cuarto fue determinante. Argentina mantuvo un equipo joven en cancha (Mainoldi-Safar-Gallizzi) que le dio buenos resultados. Panamá sintió el desgaste, perdió efectividad (0-6), y defensivamente bajó los brazos. En dos minutos y medio, Argentina comenzó 9-0, recuperando balones, asistiendo sin problemas, y con mucha confianza para anotar (43 - 26).
Panamá necesitó casi medio cuarto para anotar su primer gol de campo y siguió sufriendo el momento albiceleste. Safar continuó notable (8), y Argentina pasó bien la bola, encontró mayores espacios y con 3-3 en triples derrumbó cualquier posibilidad de remontada (57 - 30). Argentina defendió bien, obligó a su rival a seguir lanzando mal y pudo quedarse sin problemas 59 - 36 el periodo.
El final fue todo de los pibes. Argentina pudo rotar todo su plantel, y cada uno que ingresó le respondió de buena forma. Deck tuvo un final a todo motor (7 puntos, 2 rebotes, 2 asistencias), mientras que Delia pudo anotar, Laprovittola fue el comandante asistiendo y generando espacios para que todos puedan lucirse. Panamá comenzó a ser un simple espectador de la velada. Brussino aportó un triple para tomar la máxima de 78 - 46, que todos tomen confianza, y como frutilla un lindo bombazo del propio Deck para ganar sin problemas y con solvencia tras el mal comienzo de match.
