A pesar de que existen multitud de academias en las que entrenar para llegar algún día a ser modelo. A pesar de que existen empresas que se especializan en tratar de introducir a sus clientas en el mundo de la moda. La realidad es que las mejores no suelen salir de los especialistas en este negocio, sino que son descubiertas en la calle por agentes que las ven y son capaces de mirar más allá de la chica que en ese momento tienen delante para ver a la modelo que en el futuro pueda ser.

Existen casos muy famosos como el de la archiconocida Claudia Schiffer, la cual fue descubierta a mediados de los ochenta en un pequeño pub de la ciudad alemana de Düsseldorf por uno de los personajes más importantes de la agencia de modelos Metropolitan, Michel Levaton.

Otra gran modelo que fue hallada entre la multitud fue Kate Moss, una de las modelos más famosas de los años noventa. En su caso fue descubierta a finales de la década de los ochenta por la fundadora de la agencia de modelos Storm, Sarah Daukas, en el Aeropuerto internacional John Fitzgerald Kennedy, cuando contaba solo catorce años. Estas modelos han marcado cada una de ellas una época y han estado durante muchos años en la cúspide de la industria. Ninguna de ellas apareció un día en la puerta de una academia o de una agencia de modelos a pedir trabajo.

El siguiente caso ha surgido en un sitio aún menos común que los anteriores, nada menos que en la red social más transitada de Internet.

Ewa Wladymiruk era una chica normal, no especialmente interesada por introducirse en el mundo de las pasarelas y que no se había planteado nunca la posibilidad de dedicarse profesionalmente a recorrer una y otra vez las pasarelas de medio mundo vistiendo los modelos de los mejores diseñadores del mundo ni pasarse horas posando para fotógrafos contratados por las mejores y más cotizadas marcas del planeta.

Sin embargo un día recibió un mensaje en su cuenta de Facebook que le cambió la vida. En un principio pensó que era una broma, incluso cuando comprobó que la agencia de modelos existía respondió con cautela, sin emocionarse demasiado por ahora. Sin embargo, iba en serio. Ahora es una de las nuevas promesas de una industria que desayuna jóvenes promesas cada mañana.