Los docentes de Mendoza por tercera vez en quince días se enfrentan al gobierno de Alfredo Cornejo para rechazar su política de mínimo o escaso diálogo. Cientos de banderas celestes y blancas, cientos de docentes y trabajadores de la Educación nucleados en el SUTE (Sindicato Unido de los Trabajadores de la Educación) se reunieron este lunes 21 de marzo en las puertas valladas de la legislatura, para decirle no por tercera vez al intento del gobierno de eliminar la instancia paritaria y con ello someter el aumento de los sueldos a decreto.

Desde las 9 de la mañana de este lunes soleado y consecuentemente con lo que las redes sociales venían anunciando la suspensión del debate parecía inevitable, o por falta de quórum o resistencia de algunos diputados de la oposición.

Néstor Parés, presidente de la Cámara de Diputados, debió posponer el tratamiento de la discusión para este miércoles 23, a fin de reunir los números como así también disponer de más tiempo para rencausar el debate que por ahora no muestra una salida ni limpia ni consensuada.

Los docentes, mientras tanto, esperaron afuera de la Legislatura a que llegara la confirmación de esta suspensión, entendiéndola como una victoria a sus reclamos y convocando nuevamente a este miércoles a los delegados a reunión plenaria en sus departamentos. Se puede adelantar que los docentes han salido refortalecidos por la inmensa convocatoria de este tercer paro (95 % de adhesión según el SUTE, y 70 % de acuerdo con datos oficiales), por lo que es muy posible que sea el paro otra vez su postura en caso de que el gobernador radical Alfredo Cornejo no vuelva a dialogar salarios e ítem aula.

Se vio y escuchó además de a los oradores del SUTE, a sindicalistas de distintas provincias del país que llegaron a apoyar a Mendoza en lo que ellos consideran un hecho inédito en democracia, la suspensión de las paritarias sin agotar las instancias legales que existen para no romper el diálogo.

Lo de Mendoza es "una vergüenza nacional", se oía cantar a muchos apostados en las escalinatas de la Casa de Gobierno mendocina donde a las 11 de la mañana se reunió la extensa marcha de los trabajadores de la educación.

Persistentemente, se escucha entre los docentes y por los parlantes que "docentes que asistían del surpudieron estar allí", a pesar de los esfuerzos del gobierno provincial de evitar que los maestros de otras provincias ingresaran a la provincia, revisándoles los transportes en los que venían como si fueran delincuentes, lo cual marca la postura poco democrática que está demostrando la gestión de Cornejo.