Mauricio Macri, ni bien comenzó a gobernar, empezó a perseguir a todos sus detractores, usando al poder judicial como brazo ejecutor. Por esto hemos visto bajo prisión preventiva a activistas sociales y exfuncionarios de la anterior Gobierno. Varios de ellos fueron arrestados sin condenas, en forma arbitraria. Ahora, el Presidente advierte, a través de sus empleados de Comodoro Py, que la próxima detenida sería la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Sin dudas, esto es parte de la idea del Gobierno para anular la oposición en general y a la principal referente, Cristina Kirchner.
Como dijo alguien por ahí: la ex mandataria armó en dos meses un partido político nuevo (Unidad Ciudadana) con tan solo un celular. Y con toda la prensa adicta a Macri en contra, ganó las Primarias Abiertas Simultaneas y Obligatorias (PASO).
Más allá de que arrestar a Cristina solo la victimizaria ( Para algunos analistas es improbable que ocurra), en estos momentos, con un Estado de derecho enfermo, esto puede ser posible. Cuando el poder político le cede el gobierno a los sectores económicos y financieros, puede pasar cualquier cosa.
En este sistema judicial, no hay justicia, ya comentamos en un articulo anterior, que la justicia federal argentina no tiene los ojos tapados. Cada vez más afín a la oligarquía gobernante de turno, Comodoro Py se ha convertido en parte del aparato represor del Gobierno.
Cada vez queda demostrado que el poder judicial está más pendiente en quedar bien con el presidente en gestión, que en impartir justicia para todos. Entre los ejemplos que podemos comentar está la detención de funcionarios y militantes del gobierno anterior por causas que no tienen base demostrable, y la posible detención en estos días del ex funcionario del kirchnerismo, Aníbal Fernández.
En cuanto a materia económica, podemos mostrar que han sido dos años perdidos, donde se regresó después de muchos años a la especulación financiera. Hay un 50 % más de desempleados, un millón y medio más de pobres, y salarios, jubilaciones y pensiones con el poder adquisitivo en baja. Déficit fiscal que es todo un récord histórico.
Se está discutiendo en estos momentos una Reforma Previsional, que en vez de darle más a nuestros jubilado se está debatiendo cuánto dinero menos recibirán.
Para concluir, el frente gobernante Cambiemos termina estos dos años con un indice del 65% de inflación bianual y un aumento descontrolado de los precios, que ha demostrado que Mauricio Macri se equivocó cuando dijo que el control de la inflación era una materia que aprobaría fácilmente.