Grecia logra un acuerdo con los líderes de la Eurozona para iniciar un tercer rescate financiero, tras extensas negociaciones, que duraron aproximadamente 17 horas, de acuerdo con los comunicados que efectuaron a través de la red social twitter, los jefes de Gobierno de 'Bélgica, Mata y Luxemburgo'.

El nuevo acuerdo financiero, según información de la agencia de noticias EFE, se basa en un plan de auxilio que rondaría entre '82.000 a 86.000 millones de euros', a cambio de que el gobierno griego lleve a cabo una serie de reformas en el ámbito laboral y económico.

En la misma línea se manifestó Donald Tusk, máxima autoridad del Consejo Europeo (CE), quien especificó que utilizaran el 'Mecanismo europeo de Estabilidad' (MEDE) para poner en funcionamiento el programa de asistencia económica a Grecia; y que, el mismo incluirá "serias reformas y apoyo financiero".

Por su parte, Alexis Tsipras, primer ministro de Grecia, expresó que en el debate de negociación hubo que aceptar "concesiones difíciles". En este sentido, uno de los aspectos que generó mayor controversia fue la 'creación de un fondo griego de privatizaciones' solicitado por los líderes europeos, ante la oposición inicial de Tsipras.

No obstante, Grecia tuvo que ceder y, finalmente, el 'fondo de privatizaciones' será creado.

Según advirtió Jeroen Dijsselbloem, presidente del Eurogrupo, los ingresos de dicho fondo se utilizarán para reducir las deudas de Grecia y "para reembolsar gastos de recapitalización para los bancos".

En relación con el desarrollo de la cumbre y las medidas que han acordado, Tsipras se mostró optimista al decir que, si bien existirán algunas "tendencias recesionistas", lo fundamental es que se han asegurado "el paquete de crecimiento, la reestructuración de la deuda y la financiación, para los próximos tres años".

Entre las demandas que tendrá que confirmar el 'Parlamento griego' se encuentran, además, 'una suba del 13 al 23% del impuesto sobre el valor agregado (iva)', un plan de 'pensiones y reformas laborales' que afectarán de modo directo a los trabajadores y una 'nueva estructuración del instituto de estadísticas de Grecia'.

De esta manera, el país helénico deberá aprobar de forma obligatoria y definitiva el consenso económico logrado con la eurozona y tendrá tiempo para hacerlo, hasta el próximo miércoles 15 de julio.