El anuncio fue realizado hoy por Corea del Sur y se trata de una serie de medidas que impondrá el Gobierno surcoreano a Corea del Norte, tras los ensayos nucleares protagonizados por el presidente norcoreano, Kim Jong-un, durante enero y febrero pasados.
Las sanciones comunicadas por el premier de Seúl, Hwang Kyo-ahn, incluyen la prohibición del ingreso al país de barcos provenientes de Corea del Norte. Asimismo, Kyo-ahn, advirtió sobre la restricción de cualquier tipo de negociación con el Estado vecino, el impedimento a los funcionarios del gabinete de entablar diálogo con sus colegas norcoreanos, e iniciar transacciones económicas o mercantiles con ellos.
El comunicado de Corea del Sur, según el periódico Correo, comprende además, una “lista negra”, en la que figuran los nombres de 38 funcionarios de Corea del Norte y dos internacionales; y se adjuntan, 30 instituciones - 24 de las cuales están situadas en Pyonyang. Esta nómina, se fundamenta sobre la participación de dichas organizaciones en las pruebas balísticas y nucleares que llevó a cabo recientemente la nación comunista.
Vale decir, que es la primera vez que Seúl emite una disposición de carácter profundamente restrictivo hacia Corea del Norte. Dentro del registro de excluidos se encuentra, además, Hong Sung-mu, subdirector del Partido de los Trabajadores, quien dirigió los ensayos nucleares de Corea del Norte, a comienzos de enero; y, el ex -director del Buró General de Reconocimiento, Kim Yong-chu, a quien se relaciona con dos episodios armados en la región fronteriza del “Mar Amarillo” durante el 2011.
En este sentido, uno de los países afectados por los nuevos condicionamientos de Corea del Sur, es Rusia, fundamentalmente por las restricciones marítimas; ya que el paquete de medidas unilateral dispone que no podrán ingresar a sus aguas barcos de cualquier procedencia que hayan estado previamente, alrededor de 180 días antes, en Corea del Norte.
Este último aspecto, cobra mayor importancia al considerar que Rusia mantenía un proyecto comercial con Corea del Sur, denominado Rajin-Khasan, mediante el cual Moscú enviaría cargas en tren a Rajin, puerto de Pyonyang; para luego trasladarlas en buque a Seúl. En efecto, desde el gobierno surcoreano han enviado la orden de suspender el programa multinacional con el Kremlin.
Por su parte, Rusia, según la agencia local Yonhap,no vería con buenos ojos la suspensión del plan comercial por parte de las autoridades surcoreanas, aunque todavía no hubo declaraciones oficiales al respecto.
Cabe destacar, que los límites impuestos desde Seúl a Corea del Norte, se producen tras la emisión, hace unos días atrás, dela "resolución 2270”,por parte del Consejo de Seguridad de la ONU. La mismaestipula, entre otras condiciones: la prohibición de las transacciones con Corea del Norte, en particular, las vinculadas con armamentos; restricción en la exportación de materiales industriales; control obligatorio de las cargas que se trasladan de una nación a otra y, la prohibición de ventas de “combustible aeroespacial” a Pyongyang.