El presidente de colombia, Juan Manuel Santos, recibió el Premio Nobel de la Paz 2016 por su lucha en reconciliar a su país con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El jefe de estado le dedicó el premio a las victimas de la guerra civil de esa nación. Santos cree que ese reconocimiento internacional lo ayudará a restablecer la paz en Colombia. Su gobierno pactó con Rodrigo Londoño, alias 'Timochenko', para que se termine la guerrilla en el país.
El pasado domingo 2 de octubre tenían que confirmar o rechazar ese pacto a través de un referéndum y los colombianos decidieron rechazar ese acuerdo.
Asimismo, el cese del fuego continúa y el proceso de paz también. Quienes votaron por el 'No' fueron guiados por el ex presidente Álvaro Uribe quien rechazaba ese acuerdo con las FARC argumentando que es irracional pactar con criminales, señalando que los guerrilleros son los mayores proveedores de cocaína en el mundo y exportan delincuentes para el narcotráfico en México.
Colombia dijo 'No' al acuerdo y quedó en el limbo político. El proceso de paz sigue pero ahora tendrán que reprogramar la forma en que ese país volverá a la normalidad y poder vivir todos en armonía. Santos sabe que el Nobel lo fortalece en su país pero igual tiene mucho trabajo por delante para convencer a sus compatriotas que pactar con los guerrilleros es lo mejor que puede ocurrirle al país.
Argumenta que muchas inversiones internacionales llegarían a Colombia si hubiera paz.
Los opositores a Santos aseveran que no hay razón para subsidiar a los guerrilleros y mucho menos reinsertarlos a la sociedad. Igualmente saben que a muchos de ellos no les interesa un empleo formal porque ganan mucho más dinero con el narcotráfico, la mayor fuente de ingresos de las FARC.
La mitad del país votó por el 'Sí' al acuerdo, por lo que ahora salieron a la calle para festejar el Nobel a Santos y tienen esperanza de un nuevo referéndum y que todos voten a favor de la reconciliación.
El futuro de Colombia sigue incierto y ni siquiera el Nobel de la Paz pudo calmar los ánimos.