Aunque los escoceses partidarios del No acaban de imponerse a los independentistas por un 53,30% de los votos, en Catalunya los representantes de la independencia de esta parte del territorio español( CIU, ERC, PSC) con Artur Mas a la cabeza, actual presidente de la Generalitat de Catalunya, siguen adelante con sus objetivos separatistas.

Para un argentino esto de la independencia de Catalunya es algo tan inaudito como que un Cordobés, que vive en Argentina, diga que es Cordobés pero que no es ni se siente argentino. A simple vista, o desde lejos, parece así de absurdo pero es un asunto de larga y compleja trama.

Aquí dejaremos de lado las estrategias políticas de cada partido político en Catalunya y su postura frente al independentismo porque analizar esto nos llevaría varias páginas, y vamos a entrar de lleno en el problema de sí los catalanes tendrían derecho o no a votar, es decir a proclamarse por el Sí o por el No en relación a la independencia del territorio Catalán y a optar por una nueva forma de estado y de gobernarse con independencia del estado español.

La vicepresidente de España, Soraya Sáenz de Santamaría, portavoz de Moncloa y del Presidente Rajoy, en esta delicada cuestión ha declarado que "es muy importante votar, pero también es importante respetar lo que se ha votado", recordándole a los partidos catalanes que ellos participaron de la Constitución Española de 1978 y estuvieron de acuerdo, - lo rubricaron con su firma-, en que " la soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado", según reza el artículo primero, inciso segundo de esta Carta Magna.

También hay que decir que los tiempos mucho han cambiado desde 1978 y que los partidos políticos, no solo los de Catalunya, vienen exigiendo una reforma de algunos artículos de la constitución. Lo cierto es que Artur Mas y sus aliados políticos, como lo serán a partir de ahora Junqueras de ERC ( Izquierda Republicana de Catalunya) se preparan para aprobar hoy, juntos también al Partido Socialista de Catalunya (PSC), una Ley de Consultas Populares, la que le abriría el camino al Presidente Mas a la convocatoria del referéndum previsto para el 9 de Noviembre donde los ciudadanos catalanes ejercitarían su derecho a proclamarse por un Si a la Independencia de España, como lo acaban de hacer en Escocia donde nunca se puso en cuestionamiento la legalidad o no del referéndum.

Por esto adelantaba en el título de esta nota que Catalunya no era Escocia, allí la historia y los problemas son otros.

Sin embargo, para los partidos políticos catalanes el ejemplo de Escocia (su derecho a votar libremente) se rescata como algo que, en España, se les está negando al pueblo catalán. También, sí la soberanía del estado reside en el pueblo y en la democracia, de acuerdo a este razonamiento todos los españoles tendrían también derecho a votar si quieren o no que los catalanes sigan siendo españoles.

Además de todas las reivindicaciones de Catalunya, exceptuando la económica que me parece oportunista y sumamente manipulada, estoy convencido que Catalunya tiene sus razones para querer independizarse del Estado español porque Catalunya no es España, así como el País Vasco no es España, a simple vista para cualquiera que conozca las geografías y las idiosincrasias de estos dos pueblos y las compare, por ejemplo, con las de Andalucía o las de Castilla la Mancha, o Extremadura, porque España como lo dice su constitución, se define como una "Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas ".

De acuerdo a este artículo, siempre y cuando siga en vigencia y no se reforme, los partidos políticos catalanes deberán aceptar la ilegalidad del referéndum propuesto, y sí es cierto que la mayoría del pueblo catalán quiere separarse de España, como lo han demostrado en la última Díada ( Fiesta Nacional de Cataluña que se celebra el 11 de Septiembre y que conmemora la resistencia de Catalunya al ejército borbónico en 1714) con manifestaciones masivas en Barcelona y en las principales ciudades del territorio comunitario, buscar otros modos legales de hacerlo. Están en todo su derecho.