Hoy, 25 deNoviembre, se celebra el DíaInternacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Este acto fue aprobado en la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1999. Comocuriosidad, tal fecha corresponde a un caso de asesinato, el de las treshermanas Mirabal, que tuvo lugar un 25 de noviembre hace ya más de 54 años,motivo por el cual la República Dominicana propuso esta fecha con el apoyo deotros ochenta países. Hemos evolucionado mucho en este aspecto desde entonces,aunque aún la violencia de género es uno de los problemas que más se repite a escala mundial.
Sólo un dato lanzado por UNICEFhace saltar la voz de alarma sobre la violencia de género. Según un estudio deesta organización publicado el pasado año, más de 133 millones de mujeres y niñas han sido sometidas a la mutilacióngenital, con todas las consecuencias físicas y psicológicas que esto conlleva.Esta práctica se realiza en mayor medida en 29 países africanos y en OrientePróximo. Ante estos datos, no podemos mas que escandalizarnos y sumarnos alrechazo total de la violencia contra la mujer, ya sea en el ámbito social,cultural, laboral o doméstico, porque esto, no es sólo cosa de África y OrienteMedio. Puede que en el resto del mundo no se practique la ablación, pero existenmuchos tipos de violencia arraigados a las costumbres sociales y culturales decada país.
En Argentina,durante el año 2013, casi 300 mujeres murieron como consecuencia de esteproblema, de las cuales, 19 víctimas eran adolescentes de entre 13 y 18 años. Loque significa ni más ni menos, que una mujeres asesinada cada treinta horas por casos de violencia de género, según losdatos que “La Casa del Encuentro” ha difundido con motivo del presente Día dela Mujer.
Lejos de disminuir, esta cifra aumentó en un 16% con respecto al año2012, convirtiéndose en el número más alto de los últimos seis años. Podemosimaginar ahora que los datos a escala mundial son desorbitados.
Como iniciativa para el día de hoy, la ONU lanzala campaña “Pinta tu barrio de Naranja”,con la cual pretende crear conciencia sobre este problema, que, como decimos, tiene presencia a mayor o menor escala, en todos los países del mundo.
Demomento, el Empire State y la Sede de la ONU en Nueva York ya se han unido aesta propuesta y lucen motivos naranjas. El propósito es que la lucha contra laviolencia no se quede en un mero acto reivindicativo, sinoque se cree consciencia de que es nuestra labor el que la erradicaciónde la violencia y la discriminación pueda ser una realidad.
LaDirectiva ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka alaba estainiciativa y señala la necesidad de unir esfuerzos para acabar con esta lacraque se encuentra presente en todo el mundo.
El Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha declarado que “laviolencia hacia las mujeres es una de las formas más extremas de desigualdad a nivel global, sin que conozcaningún límite geográfico, social o cultural”.
Ha señalado también la necesidadde redactar leyes efectivas destinadas a evitar cualquier tipo dediscriminación de cualquier tipo.
Realmente vamos avanzando, pero quizás sean pasos demasiadocortos, o tal vez el problema sea demasiado grande y esté tan arraigado en elser humano, que no nos quede más que seguir luchando sin descanso por un mundocada vez más igualitario.