Luciano está con nosotros
Luciano está, siempre presente, en nuestro corazón. Al oír "Él" -Composición musical de la banda Argentina Salta La Banca-, infinitas son las lágrimas derramadas. Como ahora. Este héroe se nos fue, injustamente, muy temprano. Pero durante esos 16 años de vida, querido Luciano, demostraste el valor que pocos tienen a esa edad. Y sos recordado, por nosotros, como un ángel que nos mira desde arriba.
El caso es escalofriante, ya que contiene elementos vinculados a lo que sucedió en argentina en épocas de dictadura. En 2009, fue visto por última vez con vida. Según las investigaciones realizadas, Luciano muere producto de haber sido atropellado en la autopista, luego de haber estado escapando de un individuo no identificado. No hace falta hacerlo. ¡La nefasta policía bonaerense!. Diego Torales fue el principal policía agresor. El fallo indica que fue condenado por "sometimientos psicológicos, agresiones y torturas físicas". Hay que ser cobarde muy cobarde para lastimar entre varios a un alma joven y valiente, que no aceptó ser cómplice de los verdaderos delincuentes. A Luciano Arruga lo mataron porque no robó para la Policía Bonaerense.
Nuestro héroe sólo en una ocasión pudo evadir la persecución de la policía, cuando en primera instancia decidió no robar para ellos. Pero lamentablemente, aquel 31 de enero de 2009 fue fatídico, ya que fue el día que se lo llevaron. Que decidieron que no forme más parte de este mundo. Pero se equivocaron. Físicamente, no está, pero sí en nuestros corazones y presente para millones de argentinos. No lo nombré hasta aquí por una cuestión de rechazo y desprecio, pero Diego Torales fue el individuo que estuvo a cargo de las salvajes torturas hacia Luciano. Su próxima década de vida, la pasará en una celda, encerrado. Justicia.
Este caso fue difundido a la perfección y llegó a manos de la justicia. Mucho tuvo que ver la participación de Salta la Banca y de muchas almas caritativas que se adhirieron a la causa. Por ellos, también, hoy Luciano con una sonrisa nos mira desde el cielo.
"Y cuando pasan por el barrio, Luciano deja su esplendor"