A grandes rasgos, el Femicidio es el asesinato de una mujer cometido por un hombre, por el sólo hecho de ser mujer. De este tema, hablaron el 3 de julio Fabiana Túñez, Manuela González y Gabriel Vitale, en el marco del Congreso Nacional de Género... Diversas Miradas.
El femicidio es, por lo general, el último eslabón de una larga cadena de violencia, por eso no debe juzgarse el hecho puntual del asesinato, sino el proceso que llevó a él, que tiene de trasfondo la cosificación de una mujer, o sea su simple reducción a un objeto, que puede ser destruido por un hombre que cree ser su propietario.
Sin embargo, antes de que el femicidio fuera incorporado en el código penal como un agravante del homicidio en el año 2012, el homicidio era agravado por el vínculo, o sea ascendiente, descendiente o cónyuge. Esto implicaba, que si el hombre mataba a una mujer luego de divorciarse de ella, al dejar de ser el cónyuge, el homicidio no era agravado, lo mismo pasaba en el caso del noviazgo. Además, están las comúnmente utilizadas atenuaciones, por ejemplo, por "emoción violenta".
Podemos mencionar como ejemplo, el caso de Adriana Marisel Zembrano (Lili, para sus seres queridos), de 28 años de edad, quien fue asesinada el 13 de julio de 2008 en Palpalá, Jujuy, por su ex pareja José Manuel Alejandro Zerda, con quien tenía una hija de nueve meses, a golpes con un nivel de albañilería, golpes de puño y puntapiés.
Fue condenado a 5 años de prisión por "homicidio preterintencional", y liberado en el año 2013. Debido a que en nuestro país, los femicidas no pierden la patria potestad, en la actualidad tiene derecho a ver dos veces por semana a su hija de 8 años. la niña no quiere ver a su padre, porque le tiene miedo, pero la jueza la obliga a hacerlo, incumpliendo con los derechos de la niña, de vivir una vida libre de violencia, y de ser escuchada, pero al parecer, para la jueza los derechos de un femicida son más importantes que los de la niña.
El el año 2010, se conformó el Observatorio de Femicidios Adriana Marisel Zembrano, en homenaje a ella, y a todas las mujeres que son asesinadas producto de la violencia sexista.
Actualmente, este observatorio es el único organismo que brinda estadísticas de los Femicidios en Argentina, pero es esperada la próxima implementación de un informe oficial, que se anunció luego de la marcha del 3 de junio.
El primer hombre condenado a cadena perpetua por homicidio agravado por femicidio, fue Leonardo Flores, asesino de Victoria Bértora, quien el 14 de mayo de 2012, en la ciudad de La Plata, se encontró con ella para conversar, pero no hubo conversación, ni discusión, él directamente comenzó a darle brutales golpes de puño en el rostro, los vecinos alertados por los gritos llamaron a la policía.
Pero cuando llegaron, ya nada podían hacer, la golpiza fue fatal. Flores intentó escapar, pero fue detenido, y desde ese momento está preso.
Su condena no le devuelve la vida a Victoria, pero da un fuerte mensaje: el femicidio es inaceptable, y por eso merece la pena máxima de nuestro país, cadena perpetua. Quienes juzgan el femicidio, ya no se centran en el hecho puntual, sino que se centran en la violencia sexista, es un componente más, el más grave, pero no el único de la violencia ejercida hacia una mujer por un hombre que la ve como un objeto. Pero como dice el juez Gabriel Vitale, cuando hay una condena de esta índole "es porque llegamos tarde".