La Asociación de Mujeres de Negocios y Profesionales del Sur (AMNYP – del Sur de Buenos Aires), es una organización que además de ayudar a que otras mujeres se desarrollen, realiza un gran trabajo social. Entrevistamos a su Presidenta, Margarita Casas, para que nos cuente más al respecto.
¿A qué se dedica la organización?
En Mujeres de Negocios y Profesionales del Sur (AMNYP – del Sur de Buenos Aires), nos dedicamos a tratar de ayudarnos entre mujeres profesional o empresas y de esa manera intentar extender nuestras redes hacia otras en todo lo sé que pueda.
Por ejemplo, hay mujeres que tienen un buen emprendimiento pero no saben cómo ampliarlo o cómo seguirlo, para eso tenemos profesionales que las ayudan.
¿Cuál es el perfil de las mujeres que integran la institución?
Por ejemplo tenemos el caso de una psicóloga que trabaja con emergencias, es decir, con momentos especiales. Dentro de su experiencia se encuentra el trabajo con veteranos, con mujeres que sufren violencia de género o aquellos que tienen problemas motrices. También tenemos licenciadas en administración de empresas, contadoras, que colaboran para que otras empresarias, o vendedoras que recién empiezan, se puedan ir desarrollando.
¿Cómo es la ayuda?
Supongamos que nos presentas tu idea, por ejemplo por medio de nuestras reuniones sociales que hacemos una vez al mes en un living.
En ellas las empresas y las emprendedoras vienen y presentan sus ideas, dan su testimonio o una charla específica sobre un tema y eso después puede derivar en un taller o en algún seminario.
¿De qué otra manera ayudan a las emprendedoras?
Ahora están armando un Taller para aquellas emprendedoras que por hoy están fallando en algo, por ejemplo alguien que cose a crochet y que hace cosas muy interesantes, pero no sabe cómo presentarlo o que no tiene un gusto que no es acorde a los que los clientes quieren, entonces las orientamos en cómo pueden vender su proyecto
¿Cómo empieza a funcionar AMNYP del Sur?
Nos dimos cuenta que no podíamos hacer algo tan amplio, cuando en realidad, la caridad bien atendida empieza por casa. Entonces se me ocurrió, junto a un montón de asociadas, tratar de hacer algo más chiquito, ver las necesidades y cómo podemos ayudar a otras mujeres desde un ámbito más pequeño. Ya había gente dedicada a temas mundiales y creíamos que lo mejor era empezar por lo nuestra zona, la parte sur de la provincia de Buenos Aires, que es muy grande y en la que hay tantas necesidades.
¿Qué es lo que más te identifica de la asociación?
Siempre me intereso el tema de la mujer, ayudar a la otra a crecer y hacer de su profesión o de su empresariado un poco más, destacarse y ser esa mujer diferente que somos hoy. Me gusta machismo ayudar, ser parte de todo eso, creo que es la misma profesión lo que me lo hace ser así. La idea es que todas trabajen en equipo y hacer algo por nosotras o por otras instituciones. Por ejemplo, la que hace joyas también puede enseñarle a otra parte de ese arte, o mostrarle como manifestarse y de golpe puede ayudarnos en otro trabajo de ese momento o que surja más adelante, ya que aparecen varios temas y casi siempre hay una idea para salir adelante
¿Cómo llegaste a la presidencia?
En realidad no se me había ocurrido, me propusieron. Creo que allí hay muchas mujeres muy preparadas, muy capaces, como emprendedoras o empresarias. A mí me gusta mucho trabajar con todas en equipo, también se me ocurren ideas y les pareció bien, por lo que me propusieron. Me siento muy alagada, fue una convocatoria a la que asistieron muchas y me eligieron prácticamente por unanimidad. De todas maneras estoy haciendo muchas cosas y a veces me corro un poquito para que trabajen, pero el tema es que lo hagan en equipo. Si no se trabaja en equipo no se puede, no es una sola la que tiene la idea, somos todas.
Ya sabes, este institución puede ayudarte a desarrollar ese emprendimientoque tanto te gustaría, ¿te animas?