Un lugar para ir a cenar es sin dudas "Grotta Palazzese" en la ciudad de Polignano, en el sur de Italia. Se llega hasta ahí conduciendo por la carretera a Brindisi. Cerca de la Via Appia-Trajana existe una antigua calzada romana que une Brindisi y Roma; allí precisamente está ubicado el tradicional pueblo italiano de Polignano a Mare.
Polignano es un poblado que se asienta en un afloramiento rocoso sobre el mar Adriático, en el cual, con el paso del tiempo el mar ha abierto cavernas gloriosas en su roca caliza.
La más grande y más bella de todas estas cuevas es la denominada "Grotta Palazzese". Dentro de ella se encuentra un restaurante único, de gran prestigio internacional.
Ahora le pido que por favor deje todo lo que está haciendo y por un momento cierre los ojos e imagínese en una caverna de piedra caliza abovedada que ofrece ¡unas vistas panorámicas sobre el Mediterráneo y la Bahía de Polignano únicas!
Es más; le pido que ahora imagine un magnífico restaurante, con piedra marina en la puerta. ¡Sí, existe y está en el sur de Italia! Un restaurante caverna para disfrutar de una noche de verano con una cena que transporta; en el esplendor de una cueva, donde se siente el suave susurro del mar: es como estar en un barco navegando.
Todos sabemos que un restaurante con una bella vista puede convertir una experiencia gastronómica mediocre en una maravillosa, que puede transformar una cena en una comida inolvidable para toda la vida.
Sus impresionantes vistas sobre el Adriático, el comedor con su natural brisa marina y un menú de clase mundial, le dan una distinción al "Grotta Palazzese" a la que sólo le faltan las paredes y la estructura de material.
Este encantador lugar en la costa de Polignano, fue "construido" dentro de una cueva hace siglos, lo que lo convierte en uno de los restaurantes más exclusivos del mundo.
Tallado en la piedra caliza de la pared del acantilado, el 'Grotta' sobresale 74 metros sobre el nivel del mar, lo que le permite a los comensales ver cómo las olas lamen las orillas justo debajo de ellos.
Naturalmente iluminado por el resplandor del agua marina, la caverna en el verano ha sido el escenario de muchos momentos románticos, desde banquetes reales hasta celebraciones locales desde el siglo XVIII. Es un sitio realmente increíble.
Este restaurante está abierto desde el mes de mayo al de octubre; su menú es clásico y está basado en mariscos del Adriático y por supuesto, todas sus recetas originales italianas, armonizan con el sabor del Mediterráneo.