Marcelo Bielsa causa expectación donde quiera que entrene, ya era toda una personalidad en Argentina y en España se produjeron no pocas anécdotas con sus excentricidades que sorprendían cada cierto tiempo. En Marsella está ocurriendo lo mismo y en general en toda Francia donde ya se puede decir que es sin lugar a dudas el entrenador del año en la Ligue 1.
Quizás el fenómeno esté siendo aún mayor en el Olympique ya que la heladerita en la que se sienta Marcelo a ver los partidos va camino de convertirse en un símbolo. Esto lo han comprendido bien desde el club blanquiazul y en Adidas aprovechado para comercializar la nueva equipación suplente que se vende con la heladerita incluida por un precio de 70 euros.
Con esta medida lo que Adidas pretende es aumentar las ventas de la equipación suplente ya que los aficionados marselleses no quieren quedarse sin la nevera de su querido técnico. Además de esta nueva acción de marketing, los medios de comunicación no paran de pedir entrevistas y hacer reportajes con el técnico Rosarino. La trayectoria como técnico del "Loco" Bielsa comienza en Newell's Old Boys en 1990 con gran éxito apostando por lo jóvenes y como marca de la casa el constante desdoblamiento ofensivo/defensivo de sus hombres, los títulos le avalaron.
Marchó al reto de Mexico y volvió reproducir el éxito en Atlas y América con una apuesta por la juventud que llegó a influir en la selección mexicana de la cual le propusieron ser técnico, rechazando Bielsa la propuesta.
Su vuelta al Fútbol de su país fue en Velez Sarsfield donde también saldría campeón, saliendo del equipo por problemas con Chilavert y parte de la plantilla, aunque el principal motivo fue el desgaste psicológico de una plantilla ante el alto nivel que pide el "loco" a sus equipos.
Saltó al fútbol europeo por primera vez con el Espanyol de Barcelona pero fue por unos solos meses, a su regreso le esperaba todo un reto, entrenar a la selección argentina en 1998 registrando buenísimos números y marchándose por motivos personales.
Marcelo aceptó el reto de entrenar a una selección chilena a la que llevó a unos niveles altísimos y siendo todo un mito en el país, la diferencias en este caso con el nuevo presidente de la federación chilena hicieron que dejase el cargo.
Su vuelta a una gran liga se produce en España donde llevó al Athletic a jugar tanto la final de la Europa League como la Copa del Rey perdiendo las dos por el desgaste físico que tenía una plantilla corta, su segunda temporada fue bastante más discreta y enfrentamientos con la directiva y jugadores hicieron que saliese por la puerta de atrás. Ahora vuelve a encontrarse feliz en Marsella ¿hasta cuando llegará el idilio?