Pocos días después de batir el record de goles histórico de la liga española, hasta entonces en manos del mítico Telmo Zarra, Lionel Messi sigue encadenando records y supera a Raúl como máximo goleador histórico de la Champions League.

Hacía ya algunas semanas que tanto Messi como Cristiano Ronaldo amenazaban el record del 7 madridista. Era casi una cuestión de suerte saber quién de los dos lo haría y ha resultado ser Messi, nada menos que con un triplete que le endosó ayer al Apoel chipriota, un equipo que se estaba mostrando en esta edición bastante difícil de batir.

El anterior record estaba en 71 goles, que Raúl consiguió marcar en 142 partidos que jugó a lo largo de su carrera. Así, el nuevo baremo de Messi adquiere más valor en cuanto que se ha conseguido tan solo en 91 partidos. Los que necesitó para meter los 74 goles que le avalan como el mejor goleador europeo de la Champions League hasta el día de hoy. Y decimos hasta el día de hoy porque esta noche juega Cristiano Ronaldo, que con 70 goles en la actualidad, promete no dejar a Messi dormirse en los laureles. Cabe prever que la competencia feroz que estos dos genios mantienen conseguirá elevar el registro goleador histórico, semana tras semana, a cifras inalcanzables para ningún otro jugador durante décadas.

Ambos están reescribiendo la historia del Fútbol y cuando se retiren su legado perdurará un tiempo incalculable.

En las últimas semanas Messi parece estarse recuperando de un año que no había sido particularmente bueno. Primero sus problemas judiciales en España con la Hacienda Pública española, sus extraños problemas estomacales y la sospecha que se extendió entre la hinchada azulgrana de que se estuvo reservando para un mundial que, igualmente resultó fallido, habían hecho que la afición se cuestionase acerca de si podría alcanzar otra vez el rendimiento del pasado.

La entrevista de hace unos días ante la prensa argentina dejando entrever que quizá su futuro no estuviese en el F.C. Barcelona sembró de terror a los aficionados. Pero todo parece indicar que el astro argentino vuelve a ser feliz y de nuevo está lanzado a dejar su nombre en lo más alto de la historia del fútbol.