Los Atlanta Hawks son ahora mismo terceros en la Conferencia Este, justo entre los Washington Wizards y los Chicago Bulls. Es una posición que les concede una enorme tranquilidad con vistas a una temporada en la que los grandes favoritos no lo son tanto y los equipos se conforman en muchos casos con llegar a los playoffs, donde la victoria tendrá poco que ver con los resultados obtenidos durante el resto del año. Por el contrario, los Miami Heat están cerca de los últimos puestos que conceden plaza para acudir a dichos playoffs, a pesar de que en sus filas tiene a algunos de los mejores jugadores del campeonato.
Los Miami Heat comenzaron el partido planteando el juego alrededor de Luol Deng, alero titular del equipo y uno de sus mejores tiradores. Esto ya decía a los entendidos que este sería un partido en el que los Miami Heat tratarían de imponer su mejor capacidad anotadora para tratar de no permitir que la mejor calidad de los Atlanta Hawks en las jugadas posicionales les ayudase a ganar el partido. Sin embargo, los de Georgia no dejaron que este planteamiento les superase y rápidamente eliminaron a Loul Deng de la ecuación, forzando además a los Miami Heat a tiros poco cómodos que les acabaron por no funcionar. El cuarto acabó con un resultado de 18 a 27 que dejaba poco margen a los Miami Heat para maniobrar en el resto del partido.
El siguiente cuarto fue planteado por los Atlanta Hawks como una transición en la que usaron a algunos de sus jugadores más frescos para aguantar el marcador y esperar a la segunda mitad para lograr nuevas ventajas importantes. Este planteamiento les funcionó muy bien y solo entregaron 1 punto en un 29 a 28 que a pesar de ser en su contra les benefició más que a sus rivales.
El tercer cuarto fue claramente para los Atlanta Hawks, que destrozaron a unos Miami Heat que acabaron por claudicar en vista de que no podían seguirles el ritmo a sus rivales. Al final del cuarto estaban ya con un marcador global de 72 a 88.
El último cuarto fue un simple trámite, ninguno de los dos equipos pensaba que el resultado pudiera cambiarse en los siguientes minutos.