Argentina siempre es candidato en este torneo. Lo ha ganado tantas veces que en cada inicio de certamen todos lo ven como el gran favorito a consagrarse por historia, camiseta, grandeza en la categoría y la jerarquía de sus figuras. Con todos estos condimentos el equipo dirigido por Humberto Grondona apenas empató con Panamá 2 a 2 en el debut de ambos en el Mundial Sub 20 realizado en Nueva Zelanda en un encuentro correspondiente al grupo C.
En lo que en la previa se presumía el rival mas débil de la zona, al momento de jugar quedó claro como surgen los imponderables en este deporte o las sorpresas como más les guste a los aficionados. Ya no se gana con la casaca solamente y los caribeños dieron mucho más de lo esperado.
En un comienzo, donde el albiceleste comenzó mejor con el manejo de pelota tratando de atacar a los panameños, el primer grito no tardaría en llegar. Una buena jugada elaborada entre Martínez y Correa finalizó en una gran definición del rosarino para poner en ventaja al elenco argentino. Sin embargo, poco tiempo después llegó la igualdad de los centroamericanos con un zapatazo de afuera del área de Rodríguez.
Tras el 1 a 1 el duelo no tuvo muchas acciones de peligro, los chicos de nuestro país trataron de hacer circular el balón hasta tres cuartos pero faltaba profundidad en los últimos metros. Correa bajaba para participar del juego y tratar de generar en ofensiva. Gio Simeone quedó aislado y la pelota nunca le llegó limpia para desequilibrar. Un tiro libre de Rolón dio en el travesaño y Batalla tuvo trabajo en una salida en la que le tapó el remate a un atacante panameño. La Selección nacional era algo más pero no se llevó por delante a su oponente y el primer tiempo se fue con un sorprendente empate.
En el complemento se vio lo mejor del partido con posibilidades de convertir en los dos arcos.
Nuevamente, Batalla se lució sacando una chilena tras un tiro de esquina en la primera ocasión clara del segundo tiempo. Argentina con el correr de los minutos fue creciendo y fue a buscar el segundo gol. Los ingresos de Espinoza, Cubas y Pavón le cambiaron la cara al equipo, al igual que la influencia de Correa, la gran figura del plantel. Martínez quedó mano a mano con el arquero pero este le ahogó el gol tapándole el remate y un cabezazo de Monteseirin obligó la gran estirada del arquero panameño.
En el mejor momento de Argentina apareció de vuelta Correa para empujar la bocha a la red tras una mala salida del portero y otra vez, como en el primer tiempo, Panamá igualó al poco tiempo con un tiro a quemarropa de Escobar que picó en el suelo antes de entrar al arco.
El cotejo se volvió vibrante ya que estaba para cualquiera: Panamá estuvo mas cerca de la victoria en un contragolpe que Carlos Small, quién cara a cara con Batalla envió su remate desviado en una chance clarísima para ganar el partido; mientras que para Argentina, Simeone pudo convertir en una situación propicia que no llegó a cabecear. Fue empate por 2 a 2.
El técnico del seleccionado nacional no se mostró conforme con la igualdad. Sus jugadores mostraron virtudes en ataque pero en defensa no hubo solidez. El campeonato sigue y resta jugar con Ghana y Austria en una competición que parece ser dura y pareja.