Un nuevo día, una nueva semana y un nuevo mes empezaron ayer. Y también una nueva ilusión de prepararse para competir por el mayor premio futbolístico de nuestro continente: la Copa América. Es por eso que Gerardo Martino, DT de la Selección Nacional, dio inicio al trabajo en el predio de Ezeiza con el plantel parcial de los 23 elegidos.

Ayer sólo se entrenaron 14 futbolistas, entre los que se encontraban el arquero Nahuel Guzmán, los defensores Pablo Zabaleta y Martín Demichelis y Marcos Rojo, quien estuvo de recorrida en la ciudad de La Plata donde el presidente de Estudiantes y ex jugador Juan Sebastián Verón le entregó una placa conmemorativa.

Junto a ellos también estuvieron practicando y ejercitando el jugador de Boca Fernando Gago, Ever Banega, reciente bicampeón con el Sevilla de la Europa League, Ángel di María, Sergio Agüero y los campeones del Paris Saint Germain Javier Pastore y Ezequiel Lavezzi, entre otros.

Por la noche, arribaron al país el arquero titular Sergio Romero y Lucas Biglia, a los que hoy se sumaron Gonzalo Higuaín y Facundo Roncaglia, completando un total de 18 deportistas hasta el momento. Los cinco jugadores restantes llegarán durante el fin de semana, luego de disputar los últimos partidos con sus correspondientes equipos europeos.

Sin dudas, la mayor expectativa está puesta en la llegada de Lionel Messi, quien junto a Javier Mascherano defenderá la camiseta del Barcelona frente al tanque italiano de la Juventus, con Carlos Tévez entre sus mayores figuras, en la final de la Champions League, un evento deportivo que paralizará a fanáticos del Fútbol en todo el mundo.

El choque entre los titanes futbolísticos se producirá el sábado 6 de junio en Berlín, con transmisión de ESPN para toda Latinoamérica.

Una vez culminado el encuentro, Lionel Messi, Javier Mascherano y Carlos Tévez viajarán directamente a Chile para acoplarse al resto del plantel y comenzar a entrenar con fuertes posibilidades de lograr el reto máximo de ganar la Copa América.

El espíritu general de los jugadores es muy positivo, y todos tienen la mente en obtener el trofeo que le es esquivo a nuestra selección desde hace más de dos décadas. Los elogios generales, tanto del técnico como del resto de sus compañeros, recaen en Lionel Messi, quien viene demostrando un nivel superlativo y se supera partido a partido con las genialidades que les regala a los espectadores que lo miran fascinados y asombrados por sus cualidades. Sólo resta esperar que se termine de ensamblar el equipo, y que con el plantel de lujo que dirige Gerardo Martino el seleccionado llegue a levantar la copa y a festejar un enorme triunfo tan necesario para intentar aplacar la frustración del Mundial de Brasil.