El 31 de mayo de 2015 quedará en la memoria de los hinchas de River Plate como el día que el "Payasito" Pablo Aimar se calzó nuevamente la camiseta del club de sus amores. Fue por la 14° fecha del torneo de 30 equipos de Primera División, frente a Rosario Central en el Monumental. Ingresó a los 31 minutos del segundo tiempo, metió un caño, dio una asistencia y con eso bastó para darle la ilusión a los presentes de que la magia seguía intacta.

El 3 de junio de 2015, en Formosa y por los 32vos de final de la Copa Argentina, River enfrentó a Liniers de Bahía Blanca, le ganó 2 a 0 y Aimar volvió a sumar minutos.

Esta vez, fueron 30 minutos de acción con un buen nivel, pidiendo el balón e intentando hacerse cargo del equipo. Y como en los viejos tiempos el Fútbol argentino se renueva.

Y el 14 de julio de 2015 iba a ser el regreso del "payasito" al terreno internacional representando a River, por las semifinales de la Copa Libertadores ante Guaraní de Paraguay. Pero fue todo lo contrario. Marcelo Gallardo, dt millonario, decidió no incluirlo en la lista de buena fe del certamen continental y eso fue el detonante para la conclusión final: colgar los botines.

Además una seguidilla de partidos importantes entre Copa y campeonato, involucran a River Plate y una agenda muy apretada, pero a pesar de ello, Aimar no encontró un lugar para volver a jugar.

Canchallena publicó una carta que Aimar le escribió al plantel y en la que expresó "intenté todo para poder estar físicamente a la altura de ustedes. No me dio, ayer me comunicaron que no voy a estar en la lista de la copa, y lo entiendo, no quiero ocupar un lugar que seguramente es para otros muchachos. Por eso decidí dejar de jugar profesionalmente".

Los dirigentes riverplatenses y el cuerpo técnico, aún creen en una ínfima chance de que el "payasito" revierta su decisión, aunque saben que es difícil y que dependerá del jugador. Gallardo dijo en la conferencia de prensa luego de la victoria ante el equipo paraguayo ""Hablé con Pablo y le dije que por su estado físico y por la lesión que arrastra no podía incluirlo.

Tenemos la ilusión de que siga con nosotros, pero no sé...".

En junio de 2014, River intentó repatriar a Pablo Aimar y este dijo que no porque tenía una lesión crónica de la cual debía recuperarse antes de volver a vestir la banda roja. Se operó por un sobrehueso en el talón de Aquiles del pie derecho e intentó regresar a jugar, pero sin éxito. En febrero de este año fue intervenido quirúrgicamente en el mismo lugar pues persistían las molestias que no lo dejaban realizar normalmente su actividad física para ponerse a la par de sus compañeros.

Con tan solo 35 años, uno de los máximos ídolos de River tiró la toalla. Internamente sabe que dejó todo para volver a patear un balón dentro de un terreno de juego de manera oficial y con el nivel que le habría gustado, pero no alcanzó.

Luego de tres operaciones que no sirvieron para calmar los dolores del tobillo derecho, de más de seis meses de inactividad, de una puesta a punto que nunca llegó y de quedar afuera de la lista de la Copa, el "payasito" se quedó sin sonrisa y le puso fin a su carrera.