Este lunes 21 de septiembre se reúnen en Quito, Ecuador, los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Colombia, Juan Manuel Santos, para avanzar hacia la búsqueda de una solución diplomática al conflicto fronterizo que mantienen ambas naciones.
La reunión, que se realiza gracias a la mediación de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), se desarrollará en el palacio de Carondelet, sede de la Presidencia de Ecuador.
Maduro anunció el domingo que el único tema a debatir con su par neogranadino es el combate al narcotráfico por parte de la nación vecina.
“Yo mañana me reúno con Santos y el tema que le llevo es ese, ¿Van a combatir el narcotráfico en Colombia si o no?”, dijo en declaraciones que recoge el Correo del Orinoco.
El jefe de Estado venezolano acusó a Colombia de no combatir el flagelo del tráfico de drogas y el contrabando de productos y gasolina en la frontera y que están afectando la economía de este país, por lo que decidió hace un mes cerrar los pasos fronterizos.
Por su parte Santos ha venido exigiendo el respeto para sus connacionales repatriados y aseguró que las autoridades venezolanas han violado los Derechos Humanos de los colombianos que habitan en la región fronteriza.
En su cuenta oficial en la red social Twitter, el Mandatario colombiano aseguró que acudirá a la cita en Quito sin mayores expectativas.
“Viajamos mañana a Ecuador con las mejores intenciones, pero sin grandes expectativas”, escribió.
El encuentro entre los presidentes ambas naciones se dará luego de dos reuniones previas sostenidas por las canciller de Delcy Rodríguez (Venezuela) y María Ángela Holguín (Colombia), reuniones que no dejaron los resultados esperados para darle solución definitiva al conflicto diplomático.
Los dos últimos episodios de esta trama entre los países independizados por Simón Bolívar, ocurrieron al final de la semana pasada, el primero, el día jueves en la noche cuando un avión militar venezolano se estrelló en la zona fronteriza del Cajón de Aracua, en el estado Apure, que dejó a los dos aviadores muertos. En palabras de la presidencia venezolana, los pilotos perseguían a una aeronave vinculada presuntamente al narcotráfico que había ingresado de forma ilegal al espacio aéreo del país caribeño.
Un segundo hecho, ocurrió la noche del sábado con el asesinato de dos indígenas de la etnia wayúu presuntamente a manos de oficiales venezolanos, cuando se desplazabas en una motocicleta por el territorio fronterizo.
Según reporte del diario El Colombiano, los dos indígenas se trasladaban a territorio venezolano luego de asistir a un ritual fúnebre en Colombia, cuando fueron atacados a tiros.