"Ruega por nosotros", la novela escrita por Alfonso Carvajal y que recientemente salió a la venta, mueve los pilares más importantes de la Iglesia Católica y de la sociedad en general.

El día 26 de enero de 2011, fueron encontrados dentro de un vehículo, dos jóvenes sacerdotes de 30 años de edad, asesinados con disparos de bala, en un barrio de Bogotá, Colombia.

La policía inició las investigaciones de rigor en busca del asesino que perpetró el hecho cuando, sin salir aún del asombro, la causa dio un giro importante. Ambos sacerdotes, Rafael y Armando, conformaban una pareja gay y al enterarse de que uno de ellos había contraído sida y sífilis, decidieron contratar un sicario que terminara con sus vidas y simular que fue un robo.

Las autoridades eclesiásticas decidieron guardar silencio, mientras la sociedad estaba conmocionada por lo sucedido.

Este hecho real llamó la atención de Alfonso Carvajal, quien decidió sumergirse en este delicado tema y convertirlo en una novela que salió a la luz en marzo pasado.

Alfonso Carvajal nació en Colombia en el año 1958. Es un escritor de vasta trayectoria; ha publicado Libros de poesía, novelas y cuentos; es columnista de periódicos y revistas, escritor de artículos literarios y editor de renombrados autores.

Enterado de la noticia, Carvajal comparó inmediatamente lo acontecido con la tragedia de Romeo y Julieta, de Shakespeare, debido a su mirada siempre poética. Comenzó a interiorizarse de lo sucedido aquel 26 de enero, hasta que notó que la sociedad toda había hablado de ello.

Sin embargo, 'René y Rómulo', los nombres de los sacerdotes en la ficción, no habían podido dar su versión de los hechos y ya no podrían hacerlo nunca más. Se dio cuenta así que tenía el final de la historia y decidió iniciar la construcción de la ficción, con algunos hechos verídicos.

De acuerdo a su autor, la trama roza constantemente el límite entre la realidad y la ficción, logrando armar un rompecabezas con piezas de ambos, en relación a un suceso cruel e inesperado.

Su comparación con Romeo y Julieta le permitió dar forma a una historia de amor trágica y prohibida. Dos personajes con un sentimiento inaceptable -no sólo por la sociedad, sino principalmente por sus investiduras de sacerdotes-, se encontraban frente a un pacto de amor que los hacía sentir capaces de vencer cualquier adversidad.

Y cita una frase contundente: "aquí los protagonistas de alguna manera fueron 'suicidados por la sociedad'; son mártires y verdugos de sí mismos".

Con mucho respeto el autor incursionó en el mundo homosexual, considerado marginal y promiscuo. Siendo que la sexualidad es parte natural de la vida de los seres humano, la religión la convirtió en pecado. De esta manera, la novela deja entrever duros cuestionamientos, tanto a la Iglesia como a la sociedad en general, donde la sexualidad sigue siendo un tabú, transformándose en un arma letal contra ella misma.

Finalmente, el autor revela su deseo de hacer visibles a los protagonistas de esta historia, rindiéndoles un homenaje a través del relato de su historia de amor y de su tragedia.