Lemmy Kilmister, líder de Motorhead, celebró el 13 de diciembre su cumpleaños número 70 en una fiesta privada. Sorpresivamente, adelantó los festejos casi dos semanas, ya que su fecha de nacimiento es el 24 de diciembre de 1945. La fiesta tuvo lugar en el Whiskey A Go Go de Hollywood. Entre los invitados estuvieron los ex integrantes de Guns N’ Roses Matt Sorum, Slash y Duff McKagan, Robert Trujillo de Metallica y Zakk Wylde, líder de Black Label Society y ex guitarrista de Ozzy Osbourne.
Este año, Lemmy Kilmister tuvo diferentes complicaciones de Salud, por lo que tuvo que interrumpir y cancelar conciertos de la gira de presentación del último álbum de Motorhead, 'Bad Magic'.
El líder de la legendaria banda de heavy metal se vio obligado a modificar sus hábitos de consumo de alcohol, cambiando whiskey por vodka con jugo de naranja, y también dejó de fumar. Sin embargo, Kilmister está cansado de recibir preguntas sobre su salud. Puntualmente, dijo en una entrevista con la revista Classic Rock que está harto de que le pregunten cuándo se va a morir.
A pesar de contar con 40 años de carrera, Lemmy no tiene intenciones de retirarse. Comentó que tras cumplir 60 años comenzó a sentir cambios físicos repentinos, pero no piensa rendirse. Agregó que no tiene arrepentimientos, aunque quizás hubiera deseado hacer algunas cosas mínimas de otra manera. El líder de Motorhead está conforme con la forma en que se presentaron las situaciones de su vida.
Considera que ha sido honesto consigo mismo y con su público.
Lemmy Kilmister aseguró que su edad le hizo darse cuenta que la muerte es inevitable. El legendario músico de heavy metal no está preocupado ni tienen miedo de morir. Dijo que, cuando se vaya de este mundo, espera partir haciendo lo que mejor sabe hacer. Anteriormente, había declarado que continuaría con su carrera musical mientras estuviera en condiciones de subir a un escenario. Finalmente, Lemmy consideró que si se muriese mañana, no tendría de que quejarse porque ha tenido una buena vida.