La banda estadounidense regresó a los escenarios luego del trágico fallecimiento de su vocalista líder Chester Bennington, en un concierto en su honor, en el cual participaron muchos artistas de alto nivel.

Desde julio pasado, cuando la banda se encontraba en descanso tras su tour mundial y la salida de su último disco One More Light, la banda no pisaba un escenario y tardó mucho en recomponerse emocionalmente para lograrlo. Esto se notó ayer en el Hollywood Bowl de Los Ángeles, donde el cantante Mike Shinoda comenzó el show con su voz quebrada, solo sobre el escenario cantando un mash up de tres de las canciones más tristes de Linkin Park: Robot Boy, The Messenger e Iridescent.

El comienzo del show fue una última despedida, como un reencuentro espiritual con Chester; el último adiós para despedir el dolor porque la vida sigue. El concierto dado en ese sentido se dividió en varias secciones. La primera claramente emocional, en donde la banda tocó dejando cantar al público el clásico Numb en su totalidad, y presentación canciones melancólicas como Shadow of The Day con Ryan Key de Yellowcard en voz, y Leave out all The Rest con Gavin Rossdale de Bush como invitado, y cerrando el primer tramo emotivo con One More Light, canción lema de despedida.

Entrando en la siguiente etapa del show, en una etapa donde la banda demostró que aún pueden continuar, y quieren hacerlo, porque aún son músicos profesionales y es lo que hacen para vivir, demostraron el profesionalismo para continuar, a pesar del dolor, presentando una nueva canción enteramente cantada por Shinoda llamada Looking For an Answer, la cual retrata la búsqueda de una respuesta en el dolor de la incertidumbre de Bennington.

Lo siguiente fueron momentos culmine, en donde la emoción se transformó en adrenalina, ya que llegaron los invitados más esperados y más emocionantes de la noche, Oliver Sykes de Bring Me The Horizon en voz para Crawling, One Step Closer cantado por Jonathan Davis de KoRn, A Place for My Head con Jeremy Mckinnon de A Day to Remember, The Catalyst con Deryck Whibley de Sum 41, y la participación de Blink 182 tocando su canción I miss you, y en What I’ve Done, finalizando con In The End cantado por el público enteramente.

Finalmente para el encore, luego del discurso de quien fue esposa de Chester en vida, Talinda Bennington, la el concierto llegó a su etapa culmine de adrenalina y pasión, mezclada con alegría y varios sentimientos encontrados, donde definitivamente Linkin Park renació como banda, luego de tocar A Light That Never Comes con Steve Aoki y Bebe Rexha, y cerrando el show con M.Shadow de Avenged Sevenfold en Faint, y luego todos los invitados en Bleed it out sobre el escenario, quedó claro que Linkin Park no se retira, sino que bajo circunstancia adversas, se ven forzados a renacer, como banda y como seres humanos con el apoyo incondicional de sus fans, la consigna final fue clara, hacer enorgullecer a Chester, y adiós a la depresion.

Sin duda un concierto emotivo donde tanto fanáticos como músicos, dieron su último adiós, y vislumbraron un futuro aún prometedor, con el recuerdo de Chester en sus corazones.