Nicolás se pasa las noches llorando desde la salida de Maypi, su novia dentro de Gran Hermano. El boxeador no lleva muy bien la expulsión que fue hace más de una semana y está muy deprimido. Admitió que se siente muy solo y además tiene dudas de que el público lo quiera.
Parece que el santiagueño está sufriendo las consecuencias del reality, ya que el encierro no es favorable para todos.
No sólo está triste sino también le asalta la duda de cómo seguirá su relación con Maypi. Ya que el estar distanciados le hace pensar que la relación se deteriorará.
Nicolás ha confesado a sus compañeros en más de una ocasión que se siente muy solo, y algunos panelistas ya lo calificaron como el "síndrome de Mariano" que lo sufrió hace un par de semanas cuando se replanteó el seguir concursando, al saber que iba a ser padre en a los pocos días. Finalmente salió conoció a su hija y volvió, para seguir en el reality.
Nicolás, por su parte, comentó a sus compañeros que no sabe lo que se dice afuera de él, y esto le preocupa más que nada por lo que puede estar padeciendo su madre, refiriéndose a que si los seguidores del programa no lo quieren ella lo estaría pasando muy mal.
Fue Brian quien lo consoló e intentó sacarlo del drama que estaba haciendo. El de la Tablada le preguntó claramente si había llegado a su límite, a lo que el boxeador le dijo que no. Entonces le explicó que tenía que seguir dentro de la casa porque estaba más que claro que era muy querido por sus compañeros ya que no salía a placa.
Nicolás le dijo que eso estaba bien y que si se sentía querido dentro de Gran Hermano pero lo que a él le mortificaba es el hecho de no saber qué piensa la gente de afuera. Explicó que cuando son las galas no escucha nada de parte del público presente ni a favor ni en contra. Por suerte para el hermanito escuchó gritos de apoyo del público, de parte de algunos seguidores que se acercaron a la casa de Palermo.
Lo que parece que animó al boxeador que hasta el momento no dijo que abandonaba. Lo que está claro es que lo que más le preocupa es que la morocha se vaya con otro, él dijo que no dudaba pero la realidad es que sí y tiene miedo que con tanta distancia se debilite la relación .