Parece el miedo más común: lo desconocido. Ignoramos muchas cosas, pero sobre todo aquello que va a venir y claro que nos asustas. Tenemos sueños, proyectos, ideas y ganas de hacer muchas cosas nuevas, pero antes de empezar el miedo y las preguntas está ahí. Muchas veces logramos superarlas y nos lanzamos a la aventura y otras no, no logramos superarlas y nos quedamos como estamos. Para bien o mal, es seguro. Como dice el dicho: “mejor malo por conocido que bueno por conocer”.

El comunicador y periodista Julio Bevione te da sus mejores consejos para que puedas concretar aquello que quieres.

También puedes leer: "JULIO BEVIONE Y EL ABC DE LA ESPIRITUALIDAD"

¿Qué pasa cuando alguien tiene miedo antes de dar un gran paso? Qué significa?

Es un temor ligado no tanto a lo que sucede o está ocurriendo, sino a lo que estamos especulando que debería pasar o pasará. El sólo hecho de pensarlo como “gran” es un limitante, porque nos asusta. Un gran paso es la suma de muchos pequeños, solo que de esos, uno, es el que termina por resolver un asunto y suele ser el que más se nota.

¿Qué podemos hacer para cambiarlo?

Ir de a poco, pero no detenernos, sino el miedo se cuela. Y observar tanto dónde “ponemos el pie” y lo que nosotros vamos sintiendo para que nuestras emociones no terminen por nublarnos.

También puedes leer: "VOLVER A UNO MISMO: EL CAMINO DE LA FELICIDAD"

¿Existen pasos a seguir antes de un comienzo? Algo que permita que las cosas salgan como queramos.

Si, el primer paso es: haz lo que puedas con los recursos que tengas en ese momento, pero hazlo ahora. Lo segundo: no es posible. Nosotros hacemos nuestra parte y la vida la suya.

Podemos elegir cómo queremos vivirlo, pero no controlamos todo.

Dicen que todos los comienzos son difíciles, ¿qué hay de cierto en eso?

Son incómodos, no difíciles. De hecho, es lo más fácil, porque es nuevo y trae la frescura de lo nuevo. Pero no siempre es cómodo, de hecho, pocas veces lo es. De allí que solo los valientes cambian.

¿Qué pasa si eso que iniciamos no es como pensamos?

Nos tomamos una cuota de realidad. Lo que pensamos y lo que nos pasa siempre será diferente, cada día se parecerá más, y esa es la idea, pero hay que ir aceptando las cosas como se presentan y seguir andando. También, recordar que siempre podemos volver a elegir. Siempre.

¿Qué hacer si hay algo interno que me dice que eso nuevo que vamos a iniciar no es bueno o no es lo mejor?

Detenernos y revisarnos. Es posible que el peligro este afuera, sino en nosotros, es la historia que nos estamos contando.

¿Qué te parece la idea de dejar todo y empezar de nuevo por un sueño?

Nunca dejamos todo, sería imposible. Pero a veces, dejamos lo que más nos cuesta dejar y sentimos que es todo.

De todas maneras, si el sueño es más grande de lo que tienes, ve por el.

Yendo un poco más allá, ¿qué hay de cierto con ese dicho que dice que cuando se cierra una puerta se abre una ventana?

Así es, no se si puertas y ventanas, pero siempre cuando algo termina, es que algo está comenzando. No hay vacíos.

¿Se puede empezar de nuevo a cualquier edad?

Sin ninguna duda. Creo que siempre hay oportunidad de empezar, incluso hasta el último respiro.

¿Cuál sería un impedimento en un comienzo?

No saber dónde vas y para qué vas. Cuando el propósito está claro, nadie nos detiene, ni el mayor de los miedos.

¿Qué podemos hacer ante un impedimento?

Lo mejor que podemos hacer es detenernos, respirar y preguntarnos “¿qué historia me estoy contando?”.