El gobierno venezolano aceptó la propuesta de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) de readmitir a aquellos colombianos que fueron deportados del país a causa del cierre de la frontera ordenado por el presidente Nicolás Maduro el mes pasado. La propuesta fue aceptada por el presidente venezolano durante un encuentro con el secretario general de UNASUR y ex presidente colombiano, Ernesto Samper, en el marco de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que se disputa en la ciudad de Nueva York.
UNASUR dijo en un comunicado que el gobierno de Maduro acordó “que los ciudadanos colombianos deportados durante la crisis fronteriza entre ambos países que deseen regularizar su situación en Venezuela y regresar a ese país, lo puedan hacer con la ayuda de este gobierno”.
Venezuela está dispuesta a ayudar y colaborar con el regreso de los colombianos deportados durante las últimas semanas.
El conflicto fronterizo comenzó el 19 de agosto cuando Nicolás Maduro ordenó cerrar el principal punto fronterizo entre Táchira y el departamento colombiano de Santander. El motivo del cierre fue causado por un enfrentamiento entre supuestos contrabandistas colombianos y militares venezolanos, donde salieron heridos tres de éstos últimos. Luego de este hecho, Maduro ordenó aumentar la presencia militar en la frontera con el objetivo de combatir el paramilitarismo, el narcotráfico y el contrabando. Pero esta no fue la única medida tomada por el presidente venezolano, sino que además ordenó deportar a un total de 1.500 colombianos que vivían en tierras vecinas.
En tanto, alrededor de 18.000 colombianos decidieron dejar tierras bolivarianas, según informó la ONU, por miedo a la represión.
La semana pasada, en Quito, el presidente de Venezuela se reunió con Juan Manuel Santos, presidente de Colombia, donde acordaron la vuelta de sus respectivos embajadores y se comprometieron a impulsar negociaciones de carácter diplomático con el fin de terminar con el conflicto que ha tenido como consecuencia afectar la economía de ambos países.
Donamaris Ramírez-Paris Lobo, alcalde de la ciudad de Cúcuta, festejó la decisión tomada por el presidente venezolano y afirmó que el regreso de los colombianos deportados “demuestra que Nicolás Maduro quiere corregir la violación al derecho internacional humanitario”.