La candidata a presidente de Perú, Keiko Fujimori, propone pena de muerte a los violadores de niños menores de siete años. Fujimori cree que en esos casos la mejor solución es ésa porque esos criminales no merecen vivir. Defiende su idea argumentando que es una opinión personal, que no representa a su partido, Fuerza Popular. Aunque en el caso de llegar a la presidencia, la dirigente enviará esa idea al Congreso, y que cada uno vote lo que quiera, a conciencia, con un previo debate nacional.

Perú es el país de América Latina donde más ocurren violaciones, produciéndose 23 casos cada 100 mil habitantes, el 80 % de las víctimas son menores de edad.

Basándose en esa estadística, Fujimori afirma que el problema es muy grave y para solucionarlo es necesario tomar medidas extremas. Los adversarios de la dirigente creen que ella dice eso para ganar más votos, ya que en Perú mucha gente piensa así, además su padre, el ex presidente Alberto Fujimori, siempre gobernó al país con medidas radicales.

El ex presidente aprobó la pena de muerte durante su Gobierno, pero sólo en casos de terrorismo. Esa norma nunca se puso en práctica en ese país porque Perú es signatario del Pacto de San José, el cual desestima la pena de muerte. El rival de Fujimori por la presidencia, Pedro Kuszinsky, se declaró en contra de la idea de la candidata. Ellos irán a ballotage el domingo 5 de junio, la últimas encuestas resultan muy parejas para ambos candidatos, se estima que los resultados serán muy peleados hasta el final.

Fujimori ha comenzado una intensa campaña para lograr la presidencia, luego de resultar ganadora en la primera vuelta, por lo que hará todo lo que sea necesario para alcanzar su objetivo. Se sabe que ella y su padre siempre estuvieron de acuerdo con la pena de muerte, pero ella trata de utilizarlo en su beneficio, ya que muchos quieren pena de muerte para los violadores. Su adversario usa los errores de su padre para desacreditarla a ella, alegando que cometerá los mismos errores que él.