Cualquier persona religiosa, o no, pero con un grado cultural medio ha escuchado alguna vez hablar de los Pecados Capitales, una clasificación de los vicios que los primeros cristianos enseñaron a sus seguidores para seguir el camino recto de la moral. De alguna manera dejaron su marca, dependiendo obviamente de la importancia que le dé cada uno desde la fe, al hecho de ir al paraíso, o derechito y sin escalas al infierno.

Ahora bien, no sólo nosotros como comunes mortales podemos caer en la tentación y desviarnos del buen camino, sino también las instituciones, como por ejemplo el gobierno argentino.

Y es de eso que debemos tener sumo cuidado y prestar mucha atención, porque lamentablemente si se corrompe el Estado fallamos como país al no reconocer, identificar y denunciar las falencias, que hoy las sintetizamos en los siete pecados. A continuación haremos un breve repaso de cada uno y de cómo el Gobierno ha caído, intencionalmente o no, en ellos.

La Vanidad: CFK y su entorno cumplen perfectamente con este vicio. Creídos que todo lo que hicieron, hacen y harán (en caso de ganar las #EleccionesPresidenciales2015) es lo mejor que le pudo suceder a la República, el relato oficialista nos quiere hacer pensar que la Nación, la libertad y la patria nacen en el 2003; de ahí para atrás todo es puro cuento y nada se hizo bien tal y como se resalta en la agencia de noticias Telam.

La Gula: es un pecado que se refiere al hambre desesperado que debe saciarse como sea. Tomando esta analogía lo podemos comparar con el hambre de poder y perpetuidad, cuando nos dicen: vamos por todo, es un pensamiento lineal y literal. No importa lo que cueste, la gula nunca acabará, puede disminuir un poco, pero ese pecado es perpetuo y terrible.

La Avaricia: es el ansia desenfrenable de poseer riquezas, cosas, objetos, de tener mas de lo que uno necesita. Se concatena con el pecado de la Gula, ya que no importa como sea, se debe atrapar y atesorar cuanto mas se pueda. Millones de dólares, inmuebles, lo que se le ocurra.

La Pereza: la desidia, la falta de interés para solucionar temas como desnutrición, la inseguridad, la desocupación, etc.

Teniendo la mayoría en Diputados aletargan o cajonean, por ejemplo, el juicio político al vice presidente Amado Boudou.

La Envidia: es querer tener lo que tiene el otro, querer ser mas que el otro y vanagloriarse. Un claro ejemplo de ésto se da en relación a los medios, en su lucha encarnizada por tener la voz y la palabra masificada han armado un multimedio funcional al relato. Obviamente no podemos atribuir esta intención solo a un pecado capital, pero también tiene relación directa con el mismo.

La Ira: un vicio espiritual que se alimenta día a día y se nota en cada Cadena Nacional. Se refieren a ella con términos como :lucha, ideales, convicciones, pero no es mas que ira, que nos quieren hacer creer que vienen del lado de la oposición, el gorilaje, los cipayos, la burguesía, cuando en realidad no es mas que (como lo define la psicología) la proyección en el otro, de lo que es, o siente uno mismo.

La Lujuria: deseo irrefrenable de saciedad sexual, pero que no se debe tomar en sentido literal en esta exposición, ya que se trata de analogías. Lo que si podemos es comparar, aunque a mas de un Nac & Pop le duela y le moleste, son las #RelacionesCarnales que se quieren entablar con Rusia, China e Irán, vaya uno a saber a que costo, y que tanto se parece a la política menemista de los 90, de la que todo bien llamado kirchnerista se rasga las vestiduras y nunca acreditará haber participado.

Estos son los 7 Pecados Capitales que, como testigos vemos al gobierno cometer. Ojalá que este articulo le haya servido para apreciar la realidad de otra manera.