Consultado por una niña de 10 años en el popular programa de televisión Hot Seat, Charles Frank Bolden Jr, reconoció que sí hay un "Area 51" en el desierto de Nevada donde se llevan a cabo proyectos altamente clasificados, pero que no es "lo que muchos piensan". El funcionario hizo esta aclaración en referencia al persistente rumor que relaciona estas instalaciones con objetos voladores no identificados recuperados en accidentes, según publica el diario británico The Independent.
El actual director de la NASA aseguró también que los humanos pronto encontrarán evidencia de que hay vida en algún lugar del cosmos. "En la actualidad sabemos que hay miles, sino millones de planetas extrasolares, muchos de los cuales pueden ser muy similares a la Tierra", dijo al público infantil. Hot Seat es un conocido programa donde los invitados son entrevistados por niños y está producido por el diario juvenil First News.
Aunque admitió su existencia -algo que el Gobierno de Estados Unidos había negado rotundamente por décadas-, Bolden relativizó la historia -como dicen los rumores- de que en el Area 51 estén ocultas y se experimente con naves alienígenas recuperadas y aclaró que las instalaciones -ya no tan secretas- no son lo que muchos creen que son. "He estado en un lugar llamado de ese modo -admitió-, pero es un sitio normal de investigación y desarrollo". También insistió en que nunca vio "naves extraterrestres ni nada por estilo cuando estuve allí. Pienso que es debido al carácter secreto de las investigaciones aeroespaciales que se llevan a cabo allí que la gente dices esas cosas".
Bolden está seguro que pronto se hallarán otras formas de vida, si no en nuestro solar, en los miles de millones de sistemas que hay en el universo. Consultado respecto a la futura presencia del hombre en Marte, el ex marine y también astronauta estimó que podría ser posible a partir del año 2030. Sin embargo, aclaró, tal como hicieron los astronautas durante el programa Apolo, no aterrizarán de inmediato. Primero habría misiones orbitales en torno al planeta rojo, de modo de preparar el terreno con dispositivos antes de que el hombre pueda descender con un módulo a la superficie y permanecer allí un tiempo.
Respecto a la existencia de la famosa Area 51, no es la primera vez que altos funcionarios del gobierno estadounidense hacen referencia a estas instalaciones de máxima seguridad con la clara intención de desvincularlas de los objetos voladores no identificados.
En un informe desclasificado en agosto de 2013 se admitía por fin la existencia de este complejo militar. Se trata de un texto que cuenta la historia de los aviones espía U-2 en el que se hacen numerosas referencias al sitio secreto. El Area 51 se encuentra en una zona desértica cercana a la ciudad Las Vegas y desde los años 60 alimenta todo tipo de historias de conspiración.
El informe se había desclasificado en requerimiento -mediante el Acta de Libertad de Información- a una solicitud de 2005 del investigador Jeffrey Richelson. En aquella ocasión Richelson había dicho a la CNN que esa desclasificación podía indicar un cambio profundo respecto a la posición del gobierno de EE.UU. en cuanto a desclasificar documentos sobre la controvertida base y que esto significaría que en el futuro podría ser publicada más información sobre el Area 51. Algo que, de algún modo, es lo que acaba de hacer el director de la NASA.