A la quita de retenciones al campo, más los beneficios a supermercadistas, y tantos otros favores a especuladores empresariales en todos los rubros con la megadevaluación, ahora se agregan más privilegios para la población de amplios ingresos.

Gozan con el Decreto 11/2016 de una importante reducción impuestaria interna para la compra de autos de alta gama importados y nacionales. Mientras que para la adquisición de automóviles de un valor de más de $350 la tasa es de un 10%, pero con un aumento en venta del 15%, los de lujo que cuestan más de $800 mil – sin experimentar alta de precios - tienen un gravamen del 20%.

La medida renovable rige desde el 1 de enero al 30 de junio, con el fin de monitorear si aumenta la inversión de los sectores de amplios recursos e impulsan más producción. Las ventajas se extienden a embarcaciones de lujo y motos de alto costo.

El ministro de Producción, Francisco Cabrera, dijo que 150 modelos de autos no pagarán nada. El Gobierno quita el gravamen del 30% para coches de gama media que regía en la gestión kirchenista, y los lujosos disfrutan de una reducción del impuesto del 50%.

Embarcaciones:Quedan exentas de carga tributaria las que alcanzan un precio a igual o inferior a 400 mil pesos, locales e importadas; las más caras pagan una tasa de solo el 10% de su valor (le restan 70% de impuestos).

Motos:El 99% de producción nacional no abona ningún canon: el 10% se aplica para las que tienen un precio de $65 mil para arriba.

El objetivo es eliminar trabas y distorsiones a las terminales automotrices, que confiadas en la clase alta y media alta argentina, anticiparon inversiones de 3.800 millones de dólares hasta el 2017, explicó Cabrera.

Tal es el caso de Adefa, que celebró de inmediato.

Esta entidad de fabricantes de automóviles informó que ahora dispone de previsibilidad para que crezcan la producción, comercialización y fuentes de trabajo, aunque en este último aspecto no adelantó nada sobre cuántos puestos prevé que podrán crear, ni mucho menos si compartirán gratificaciones con sus empleados o elevarán sueldos.

Qué pasará con el pago en cuotas:El equipo económico sembró la incógnita. Se sabe que con la devaluación impuesta ningún vendedor disminuirá el monto de cuotas, pero tampoco el gobierno fijaría un límite; o sea que el argentino que no pague al contado queda sujeto a la libertad de mercado sin una perspectiva cierta sobre el endeudamiento a futuro.

Esquema impositivo automotriz:Suben la base imponible de 225 mil en concepto de impuesto a 350 mil, sin diferenciar entre fabricación nacional o importada.

Entonces, un auto importado cuesta 311.115 pesos menos y uno nacional de poco más de 350 mil pesos, es 111.125 pesos más barato.

Importación de libros rompe la industria nacional:El ministro de Cultura, Pablo Avellluto, comunicó que se importarán libremente los libros extranjeros.

Sostuvo que se busca ampliar la “bibliodiversidad", la pluralidad de voces y democratizar el acceso a los libros provenientes del mundo. Este mercado era sostenido por la industria interna, cuya caída será irrevocable. Sin embargo, Avelluto habló que se generarán miles de empleo, tan insostenible su argumento al punto que no explicó cómo.

Cámara del Libro se opuso con cifras concretas que aportaron rendimiento. Las publicaciones argentinas aumentaron desde 2003 (13 mil libros).Hasta 2013 sumó 30 mil. Apenas bajó la edición en la crisis mundial de 2012 (26.367).