Los amantes de los autos deportivos de Mercedes están de enhorabuena y más aún de los vehículos legendarios, esos que se revalorizan con el tiempo. Lo único malo es que en la subasta que se celebrará se estima que el comprador que lo adquiera pueda llegar a pagar hasta 2,5 millones de euros.
El 26 de junio en el festival de Goodwood se realizará la subasta de este deportivo alemán de 1998, la casa de subastas Bonhams será la encargada de que se produzca la venta al mejor postor del auto. Un superdeportivo como este, compartía rasgos con el CLK de la época, que se pueden ver claramente en la trasera y la delantera, así como en el interior, pero que en sus dimensiones y planteamiento distaban mucho del CLK versión de calle.
La fibra de carbono y el kevlar están muy presentes en el vehículo, con la reducción de peso que ello supone, el motor se ubica en disposición central de la parte posterior, el motor es un naftero V12 de 6.9 litros que compartía con su hermano de marca, el SL600, y de 640 caballos. La caja esde tipo secuencial de seis velocidades con levas en el volante.
La marca de la estrella tuvo a este modelo en propiedad hasta el año 2014, cuando procedió a ponerlo en venta y lo compró su actual propietario, que a su vez lo ha vuelto a poner en venta. La inversión en el mundo del automóvil es lo que manda. En su odómetro apenas marca 8 kilómetros así que su comprador tendrá un coche a estrenar.
El auto fue desarrollado por la división de alto rendimiento AMG y nació para ser la versión de calle del CLK GTR coupe de carreras.
El superdeportivo nació a consecuencia del requisito que imponía el campeonato GT de la FIA, que obligaba a desarrollar un modelo "de calle" para poder competir con el de carreras.
Así pues su comprador no solo tendrá un vehículo exclusivo sino una inversión al mismo tiempo, como es previsible irá ganando valor con el paso del tiempo. Lástima que no esté al alcance de los muchos admiradores de este modelo que estaba a la vanguardia de lo que podía mostrar Mercedes a finales del siglo XX.
