Brian Núñez denunció que siete agentes del Servicio Penitenciario Federal lo torturaron en el penal de Marcos Paz en julio del 2011. Los agentes son juzgados por el Tribunal Oral 1 de San Martin. Es el primer juicio por torturas de este tipo en la historia de Argentina.
Los imputados por torturar al detenido se llaman: Javier Enrique Andrada, Roberto Fernando Cóceres, Juan Pablo Martínez y Víctor Guillermo Meza.
Además están acusados de encubrir el hecho: Juan José Mancel, Juan Fernando Moriñigo y Martín Vallejos. Los cargos a los que se enfrentan son "torturas físicas y psíquicas" y "omisión de denuncia".
En el momento del hecho, Brian Núñez tenía 18 años y sufrió varias lesiones a causa de las torturas; estuvo internado y no pudo caminar por más de un mes. Los abogados del joven pidieron condenas de 5 a 18 años de cárcel. Además denunciaron que no fue la única vez que golpearon al detenido y que otros reclusos sufrieron los mismos tratos ilegales.
El juicio, que empezó el 30 de abril de este año, genera una gran expectativa en los organismos de Derechos Humanos, ya que es la primera vez que se realiza un proceso judicial en el que están imputados tantos agentes.
El CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales) pidió públicamente que el Estado genere políticas publicas en contra de la violencia institucional y ratificó la inhumana situación en la que viven los detenidos en penales y comisarias.
La violencia por parte de los carceleros no es la única agresión que deben sufrir los internos de los penales federales. El pasado 10 de marzo un preso del Penal de Batán murió electrocutado, la Mesa contra la Violencia Institucional denunció que es común que los habitantes de las cárceles convivan con la negligencia humana y el olvido del Estado. En general las condiciones edilicias no son las apropiadas, el hacinamiento, la mala alimentación y la falta de atención medica son situaciones que los presos sufren todos los días. Además, vale aclarar que muchos de los detenidos no tienen condenas firmes, y que muchos de ellos están recluidos con prisión preventiva.