Tal como lo anticipaba la boca de urna, y con el 70 por ciento de las mesas escrutadas, Mauricio Macri ganó por una ventaja de aproximadamente 7 puntos y se impuso ante el candidato kirchnerista, convirtiéndose en el nuevo presidente de la república Argentina.

Si bien el resultado era algo previsible para los allegados al partido del PRO y Cambiemos, la derrota de Scioli fue un duro golpe contra los allegados al oficialismo y también los que esperaban la continuación del modelo. Sin duda, este resultado sería impensado en el contexto de enero de 2015, Macri sólo con ventaja en la Capital se veía como un débil contrincante ante Scioli el ganador absoluto en ese entonces, y el candidato Massa, pero la alianzaCcambiemos logró una campaña tan efectiva que lograron lo imposible:derribar el modelo Kirchnerista.

Aunque ciertamente esta victoria no pertenece únicamente a Cambiemos, el propio Frente para la Victoria aportaron su parte para que Scioli fuera derrotado. Primero, el candidato Scioli tuvo que responsabilizarse de todos los errores del Gobierno durante más de 10 años. Segundo, Scioli tuvo que dividirse para satisfacer a los kirchnerista y a los sciolistas, desdibujando su imagen entrada la recta final de las elecciones, lo que provoco su desequilibrio y finalmente su derrota.

Promesas vacías, campaña sucia y agresividad, todas las aristas del kirchnerismo fueron siendo apropiadas por Scioli antes del balotaje y durante el debate previo a las elecciones, lo que dilapido y profundizo su negativa imagen.

Por el contrario, Mauricio Macri se ganó al pueblo, primero ganando en la provincia con María Eugenía Vidal, recorriendo la calles, escuchando las demandas de la gente, siendo democrático, dialoguista y principalmente afable, lo que fue bien recibido por la mayoría votante en la república Argentina. Acto siguiente, será la entrega del gobierno el próximo 10 de diciembre, heredando Macri un país prácticamente devastado por el kirchnerismo, pero con todo el potencial y la buena predisposición para reparar todo el daño hecho durante la década K.